El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, tiene previsto firmar este viernes una orden ejecutiva con sanciones secundarias para los bancos que sigan financiando a las empresas que ayudan a Rusia a mantener su maquinaria de guerra en su agresión a Ucrania.
Según explicaron funcionarios de la Casa Blanca en una llamada con periodistas, se trata de un nuevo paso para interrumpir aún más el apoyo material a la base industrial de defensa de Rusia y para obstruir los esfuerzos de Rusia para aumentar su capacidad militar.
Pero el Kremlin respondió dedicando “tiempo y recursos considerables” para encontrar la forma de eludirlas.
Aunque Washington asegura que se ha desenmascarado a muchas de esas empresas pantalla, la nueva orden ejecutiva pretende ser una nueva herramienta para perseguir a los bancos que estén aún permitiendo que las empresas a las que financian envíen estos bienes al complejo militar industrializado de Rusia o sigan haciendo negocios con Moscú.
Desde la Casa Blanca recordaron que las sanciones siempre han perseguido dos objetivos: negar a Rusia el acceso a los ingresos que necesita para la guerra y poner “arena en los engranajes” de su maquinaria bélica y desmontar su cadena de suministro.
Las acciones de hoy persiguen el segundo objetivo.
Según explicaron las fuentes, ésta es la primera vez que se aprueba una herramienta con sanciones secundarias para perseguir a las instituciones financieras durante este conflicto, que al mismo tiempo busca “desincentivar el tipo de comportamiento que está fomentando la capacidad de Rusia para construir armas” en su agresión a Ucrania.
(Con información de EFE)
Fuente Infobae