El ministro de Educación, Esteban Bullrich, analizó el paro general del jueves convocado por la CGT y cuestionó a los líderes sindicales: «La mayoría de los argentinos, nos haya votado o no, quiere otra cosa, un país normal». En ese sentido, el funcionario lamentó que «el país perdió un día y cada día lo tenemos que usar para estar un poco mejor».
El titular de la cartera de Educación analizó la coyuntura social y rechazó las actitudes de dirigentes sindicales como Omar Viviani, quien había amenazado con «dar vuelta los taxis» que hayan decidido trabajar durante el paro general: «La grieta es entre una dirigencia vieja, que está atada a formas viejas, y una enorme cantidad de argentinos que quieren ir a trabajar y estar mejor. Esa es la grieta, no hay otra».
De todos modos, consideró que «la mayoría de los argentinos, nos haya votado o no, quiere un país normal», y volvió a lamentar los dichos del jefe del Sindicato de Peones de Taxis: «Si la Argentina fuera la de dar vuelta los taxis, no hubiéramos ganado las elecciones».
En ese sentido, hizo referencia a las escuchas telefónicas entre Cristina Elisabet Kirchner y el ex titular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) a las que accedió Infobae: «Escuchamos la forma en la que se dirigía la ex presidente con respecto a todos, y esas formas son las que escuchamos ahora, por ejemplo con la amenaza de Viviani. Por eso la gran grieta es entre una dirigencia que cree en los métodos del pasado y una Argentina que quiere crecer».
Además, el ministro de Educación habló sobre el conflicto docente, especialmente en la provincia de Buenos Aires: «Mi pelea no es con Baradel, yo le quiero ganar a la ignorancia. El presidente Macri plantea un debate que sale de ese barro y eleva la discusión presentando el Plan Maestr@».
Finalmente, Bullrich recordó la marcha del sábado pasado y confesó: «Lloré frente a la televisón. Había un cartel que decía ‘No tengo fuerza para rendirme’. Para mí, esa es la Argentina».
