«Considerado el efecto multiplicador del agro en el consumo de Argentina, esta caída pone en jaque el equivalente a 2,2 puntos porcentuales del PBI que el Fondo Monetario Internacional (FMI) estima para nuestro país en 2023», remarcó el trabajo de la BCR.
Con las pérdidas millonarias del sector productor, la entidad bursátil recortó también la estimación de recaudación fiscal.
Sólo en concepto de derechos de exportación, el Estado dejaría de percibir US$ 1.050 millones en concepto de ventas externas de los complejos trigo, soja y maíz, a los que se le suma la pérdida de recaudación de otros US$ 2.500 millones en concepto de menores impuestos a las ganancias y demás tasas y contribuciones.
En el frente externo, la exportación estimada de los principales productos de los complejos antes citados cayó en aproximadamente en 24 millones de toneladas.
«Si valorizamos las exportaciones netas previstas al momento de la siembra, respecto a las que se proyectan hoy con los precios vigentes, se estima que dejarán de ingresar al país cerca de US$ 8.000 millones de dólares, una caída del 18% respecto al ingreso total de dólares del agro estimado para la campaña 2021/22», sostuvo la entidad bursátil.
Y concluyó: «Si bien esta cifra resulta atenuada por la mejora en los precios internacionales a raíz de la caída en el volumen de oferta por la sequía, este efecto precio resulta insuficiente para compensar la caída en la cantidad a exportar».
Fuente: MinutoUno