Evo Morales ve cómo el poder interno en el Movimiento al Socialismo (MAS) se le escurre y tiene una obsesión: Eva Copa. Es que la alcaldesa electa de El Alto es una de las tantas dirigentes que se han enfrentado con el antiguo líder boliviano. Esta vez, la pelea se produjo por el ataque que el ex presidente hizo hacia la política cuya figura crece en todo el país. De acuerdo a Morales, Copa se había reunido en secreto con un líder opositor de Santa Cruz de la Sierra.
“La tarde del 15 de abril, en un hotel de Tarija, se han reunido con Luis Fernando Camacho, Damián Condori, Eva Copa, Óscar Montes y otros que han ido. Los traidores reunidos con Camacho. Quiero que sepa el pueblo boliviano, especialmente los movimientos sociales”, dijo Morales en su programa Evo es pueblo.
Sin embargo, la respuesta de Copa no se hizo esperar y, además de “mentiroso”, la líder política de El Alto le recordó su renuncia y huida de Bolivia en los convulsionados días de finales de 2019. “Señor Evo Morales, no mienta al pueblo boliviano, tampoco quiera cubrir la derrota de su partido lanzando injurias y falsedades”, espetó la mujer.
“Si usted afirma que mi persona se reunió con el señor Camacho, presente pruebas y demuestre dónde y a qué hora sostuve dicha reunión. Con valentía de mujer, lo desafío a que corrobore sus aseveraciones, caso contrario usted quedará como un político mentiroso. Y si de traidores hablamos, traidor es aquel que huye y deja abandonado e indefenso a su pueblo”, añadió en un mensaje de Facebook la alcaldesa electa que abandonó el MAS tras las arbitrariedades de Morales y su vuelta a Bolivia.
Esta no es la primera vez que Morales la llama traidora a Copa y que ésta le recuerda su huida del país y cómo buscó refugio en embajadas de otros países, mientras las bases del MAS y otros dirigentes quedaban desamparadas.
Quién es Eva Copa
Hasta 2019 Eva Copa era una senadora del MAS de muy bajo perfil y casi desconocida en el país. Fue con la salida de Evo Morales y con el inicio del gobierno transitorio de la expresidenta Jeanine Añez cuando su figura se hizo más pública y relevante, ya que resultó elegida presidenta del Senado, cuando los líderes más relevantes del masismo se alejaron de los principales cargos públicos, se asilaron o se fueron del país.
En esa etapa crítica de la vida política de Bolivia, hace 15 meses, Eva Copa juró como presidenta del Senado y su figura fue clave para acordar con el gobierno transitorio la convocatoria a nuevas elecciones presidenciales y la pacificación momentánea del país, que estaba convulsionado por la renuncia de Evo Morales antes de la conclusión de su mandato, tras una protesta de 21 días debido a denuncias de un fraude electoral.
La senadora del MAS entró entonces en escenario y se la vio viabilizar junto al Poder Ejecutivo y el Legislativo la transición, la convocatoria a nuevas elecciones, la aceptación de la renuncia de Morales y la pacificación del país.
Durante ese periodo convulsionado por una profunda crisis política, Eva Copa se convirtió también en un factor de oposición y de resistencia al gobierno transitorio de Jeanine Añez, cuando existió la posibilidad de un alargamiento del mandato provisional por las postergaciones de las elecciones debido a la pandemia de coronavirus. En la línea de Morales y del MAS, Copa también bloqueó desde el Senado créditos conseguidos por el gobierno de Añez, como uno del FMI.
Copa se quejó entonces de falta de coordinación de poderes por actitudes arbitrarias de la mandataria y de sus colaboradores, y denunció persecución política judicial. La senadora también respaldó la campaña del actual presidente Luis Arce y desde que se hizo visible como líder de la renovación del MAS empezó ya a perfilarse como posible candidata de ese partido a la alcaldía de El Alto, la ciudad en la que vive y a la que representaba en el Senado.
Con el retorno del MAS al poder y en el inicio del mandato de Luis Arce, Copa se puso en carrera preelectoral, junto a decenas de otros precandidatos de su partido a la alcaldía alteña.
Pese a mostrarse como la precandidata masista con mayor apoyo popular de El Alto, no consiguió ser la elegida para postular a la alcaldía alteña por el MAS. Con el apoyo de Evo Morales, el designado para ser candidato fue el dirigente sindical y campesino aymara Zacarías Maquera.
Esta decisión fue el factor de discordia que produjo la ruptura de Copa con Morales y la cúpula del MAS, por lo que decidió alejarse del partido y aceptar la invitación de la agrupación Jallalla, que tenía como candidato a la gobernación al fallecido líder aymara Felipe Quispe, uno de los que siempre disputó con Evo Morales el apoyo del nacionalismo popular indígena en Bolivia.