Fernanda Raverta es la primera mujer en asumir como presidenta de Anses, el organismo que paga los haberes jubilatorios y las asignaciones familiares. Y no es economista sino trabajadora social, profesión que reivindica en el actual contexto y con el gobierno del Frente de Todos. Evita hablar de su antecesor, Alejandro Vanoli, funcionario al que el Gobierno le pidió la renuncia. “No me corresponde”, se excusa.
El 2 de mayo, primer día hábil tras ser nombrada, se declaró esencial el trabajo del organismo que está ahora en el armado de un esquema de atención presencial con turnos y distanciamiento antes de reabrir las oficinas. Todos los días viaja desde La Plata, ciudad donde se había instalado para hacerse cargo del Ministerio de Desarrollo. A veces llega con ramos de flores que compra en verdulerías platenses y distribuye en las oficinas y escritorios del piso que ocupa para darle un toque personal. Todavía no alcanzó a poner ni un solo portarretratos u objeto personal. En el marco de la pandemia, mantiene cada vez que puede su costumbre de usar zapatillas y vestir en forma sencilla para recorrer lugares de pago en Capital y en el Conurbano bonaerense.
-¿Ya hizo un balance de la situación que encontró en la Anses?
-Hay dos planos. Por un lado, el organismo en términos estructurales, después de cuatro años de la gestión anterior, que gestionó este organismo de otra manera, con otro método. Por otro, este organismo en modo pandemia. Durante la gestión de Mauricio Macri pasó a ser un organismo en minúscula, en coincidencia con el cambio de la tipografía oficial. Había tomado un rumbo muy distinto al que venimos a plantear desde que asumió Alberto Fernández, que es tener un organismo cuya expectativa sea que aumenten los activos para llegar de mejor manera a abrazar a nuestros pasivos. Pero además un organismo que pueda brindar desde la seguridad social un acompañamiento a cada argentino y argentina desde los tres meses de gestación. En cuanto al modo pandemia, la designación mía es del 1° de mayo. No se había tramitado aún considerar lo que aquí sucede como tareas esenciales y lo hicimos el primer día hábil. El Estado tiene que construir una inteligencia, de tal manera de dar respuesta a su población de manera ordenada. Teníamos bancos que pagaban jubilaciones, pero no teníamos al organismo que jubilaba y la vida sigue. Seguimos teniendo mujeres de 60 años y varones de 65 años que han llegado a esa edad durante la pandemia y este organismo todavía no había sido declarado de tarea esencial, lo que hicimos como primera acción de gobierno para poder poner en funcionamiento esta tarea fundamental de acompañar a la población.
-¿Y cuál es la evaluación de la gestión de Alejandro Vanoli?
-A mí no me corresponde evaluar la gestión del funcionario anterior, así que prefiero no hacer comentarios.
-Fue muy llamativo el tema del Ingreso Familiar de Emergencia, que en los primeros cálculos iba a tener muchos menos beneficiarios que lo que terminó teniendo. ¿Anses no tiene la mejor base de datos sobre la población?
-El Presidente lo explicó esta semana en una nota, que es una población que al estar por fuera del mercado formal de trabajo y no bancarizada, que no tiene acceso a ciertas cuestiones que le permiten al Estado cruzar variables y datos, terminó siendo muy difícil de construir ese número inicial. Igual, yo digo que la mala noticia es que es un número que crece, porque quiere decir que hay más familias por fuera del mercado formal de trabajo y sin ingresos. Si lo miramos en términos de composición de la población, es una mala noticia que haya más gente. Pero si lo miramos en términos de a quién va a llegar el Estado para acompañar en tiempos de pandemia, donde es bien difícil por el aislamiento y por las cuestiones que impone la cuarentena, acompañar a esas familias desde una decisión política de generar un ingreso para esas familias de 10.000 pesos quiere decir que llegamos a más familias que tienen esta necesidad.
-¿Qué va a pasar con el pago de mayo del IFE? Hay beneficiarios que por el cronograma establecido aún no cobraron el primer pago
-Estamos tratando de terminar esta primera vuelta. El cronograma termina el 3 de junio, un cronograma extenso, en el que hay 1.300.000 personas que cobran en el correo, se tuvo que apelar a otras bocas de pago porque los bancos no estaban todavía 100% activos. También por la complejidad de tener más de 8 millones de personas a las que no se puede sacar a la calle en el mismo momento por las restricciones de la situación sanitaria. Este cronograma lo vamos a corregir para la segunda vuelta del IFE, vamos a tener un cronograma bastante más corto, porque vamos a tener la posibilidad de utilizar otras bocas de pago y de hacerlo más ordenado.
-¿Podrían sumar como bocas a los municipios?
-No, en bancos. Estamos procesando el primer pago para poder pensar cuál va a ser el cronograma del segundo. Tenemos dos variables: que la prestación llegue a las familias que tiene que llegar, pero por otro lado no cometer un error en términos de lo que la emergencia sanitaria requiere, que es que no haya un montón de gente circulando.
-¿Habrá nuevos beneficiaros en la segunda vuelta?
-Todos los que cobraron o van a cobrar la primera vuelta también van a cobrar la segunda.
-¿Puede haber más?
-Puede ser que en el medio se haya procesado más gente, pero en todo caso esa población va a cobrar el IFE primera vuelta y el IFE segunda vuelta. Hoy estamos en 8,3 millones de personas y estamos procesando cerca de 400.000 personas que no eligieron boca de pago aún.
-Ya se discute la postpandemia y cómo reactivar la economía. ¿Hasta que se ponga en marcha otra vez la economía se podría extender el IFE incluso después de la cuarentena?
-Es prematuro decirlo. Hay provincias enteras donde no hay COVID-19 y por lo tanto hay una actividad productiva que se va poniendo en marcha. Lo mismo nos pasa con el ATP, la Asistencia para el Trabajo y la Producción. Esto se va poniendo en marcha en la medida que la necesidad ordena un diagnóstico y ese diagnóstico tiene una posible solución.
-¿La idea es que la segunda vuelta de IFE se pueda pagar íntegramente en junio?
-Todavía no lo puedo decir. En principio quiero terminar de pagar el 3 de junio la primera vuelta del IFE y que eso ocurra con tranquilidad.
-Hay 8,3 millones que ya lo están cobrando hasta el 3 de junio. Otras 400.000 personas que todavía no eligieron boca de pago. ¿Ese es el número máximo o puede haber más beneficiarios?
-Hay entre 300.000 y 400.000 personas más que ya estaban inscriptas y que estamos procesando sus datos, para ver si les corresponde.
-¿Que los pagos de IFE se hayan demorado tanto, que haya tantas personas fuera del radar, no habla de una debilidad del Estado?
-El Estado durante cuatro años fue un Estado que claramente perdió su capacidad, su músculo y su inteligencia.
-Una crítica o duda cuando se anunció su designación es porque no es economista. ¿Qué opina?
-Me parece que los economistas aportan mucho en lugares como estos pero nos debíamos y teníamos que tener la oportunidad de tener una trabajadora social a cargo del organismo más importante de la seguridad social. Los trabajadores sociales tenemos otra forma de construir empatía. Si algo perdimos fue la posibilidad de ponernos en el lugar del otro. Mi profesión se acomoda perfectamente a este tiempo.
-¿Revisarán el programa de Asistencia al Trabajo y la Producción? ¿Tardaron en implementarlo?
-El primer pago salió el jueves, el próximo viernes vamos a hacer otro pago y si todo sale bien entre el viernes y el lunes estará el tercer pago.
-¿El Estado tiene tantos recursos para hacerse cargo de tantas cosas? Ya se habla sobre emitir o no emitir.
-El gobierno nacional tomó la decisión de acompañar a los más vulnerables. Cuando asumió el concepto de vulnerable era distinto al contexto de pandemia. La emergencia social y económica ya la teníamos y ahora le sumamos la emergencia sanitaria. La población es distinta, por eso están los monotributistas A y B y los trabajadores que no están pudiendo ir a trabajar y la empresa no tiene rendimiento. Todo ese universo se ha puesto en evidencia a partir de esta crisis sanitaria. El Gobierno ha tomado la decisión de que todo el Estado acompañe a los argentinos y a las argentinas. También ha tomado la decisión de cuidarlos y cuidarlas por eso la decisión de acompañarlos con ingresos tiene que ver con esa decisión.
-En los próximos días se debe definir el porcentaje de aumento las jubilaciones y pensiones, la movilidad. ¿Ya está definido o aún no?
-No está definido. Se está definiendo esta semana. Tenemos la enorme responsabilidad de construir una fórmula que le gane a la inflación.
-¿El objetivo es que le gane a la inflación?
-Estamos trabajando en esa fórmula y pretendemos que más del 80% de nuestra población pueda decir que su fórmula le permitió ganarle a la inflación.
-¿Y están trabajando para la fórmula nueva más allá del decreto?
-Entiendo que sí pero no me corresponde a mí decirlo.
-¿Se vuelve necesaria una reforma previsional que haga más sustentable el sistema?
-Es difícil contestar por la subjetividad de las palabras. Por reforma previsional no todos interpretamos lo mismo. Creemos que hay que seguir estudiando en profundidad una responsabilidad que inició el Presidente cuando asumió.
-¿Y van a ver el achatamiento de la pirámide?
-A cada modelo económico le corresponde su sistema previsional. Nuestro modelo económico y nuestro gobierno apunta a pensar una Argentina que crezca económicamente con inclusión social. Esto quiere decir que podamos aumentar nuestra base de activos para que sean más potentes los ingresos a este organismo para que a partir de esos aportes de la población que sale a trabajar todos los días este organismo pueda tener la capacidad de cuidar a los jubilados y pensionados de la mejor manera posible con haberes dignos.
-¿Puede haber una reforma previsional que aumente la edad jubilatoria?
-Vamos a hacer todo lo que haya que hacer para cuidar a los activos y los pasivos. No está previsto que haya una reforma de la edad jubilatoria.
-¿Cuál es la situación de los directores de Anses en empresas? Ayer renunció Alejandro Vanoli que se había autodesignado
-En este momento lo que está ocurriendo es que se convoca a las asambleas y el primer punto del orden del día es nombrar directores y autoridades. En algunas empresas hemos recepcionado las renuncias del directorio y estamos reemplazando directores.
-¿Nos diría si Cristina Kirchner fue quien le propuso su nombre al Presidente?
-Me convocó el Presidente de la Nación.
Analía Argento/Infobae