Los futbolistas Granit Xhaka y Xherdan Shaqiri serán investigados por la FIFA a raíz de sus celebraciones pro-kosovo en el duelo entre Serbia y Suiza que se desarrolló ayer por el Grupo E.
La institución que organiza en el Mundial que se celebra en Rusia informó por intermedio de un escueto comunicado la noticia: «El Comité Disciplinario de la FIFA ha abierto un procedimiento disciplinario contra los jugadores suizos Granit Xhaka y Xherdan Shaqiri por su celebración de goles durante el partido Suiza vs. Serbia».
Tanto Xhaka como Shaqiri cruzaron sus manos para formar un ave, como gesto del águila albanesa, reivindicando sus orígenes albanés-kosovar.
El padre de Xhaka fue arrestado en 1986 por manifestarse contra el gobierno comunista en Yugoslavia. Permaneció tres años en prisión, hasta que quedó en libertad y se exilió en Suiza. Por entonces, la etnia serbia era privilegiada en aquella sociedad, por encima de kosovares, croatas y bosnios. El futbolista nació en tierras suizas, pero siempre defendió sus raíces.
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Algo similar ocurrió con Shaqiri, quien nació en Kosovo y sus padres en Albania. A los 2 años, su familia huyó de la crisis que vivía esa zona y también se exilió en Suiza. Su relación con su nación es tal que en sus zapatos de los partidos durante el Mundial tiene bordadas las banderas de Kosovo y Suiza.
Fuente: Infobae
