La comunidad católica bandeña se dio cita, en la mañana de este miércoles, en la parroquia Santiago Apóstol para celebrar la fiesta patronal. La santa misa que estuvo presidida por el obispo diocesano Francisco Polti quien destacó el crecimiento que generará en la ciudadanía la puesta en marcha de la Capilla de oración Perpetua.
Durante la homilía, el prelado indicó: “Con profundo gozo estamos aquí reunidos, como discípulos y misioneros de Jesucristo, para celebrar en honor de Santiago Apóstol. Como un solo Pueblo de Dios, hermanados en comunidad de oración, nos dirigimos a él, el primero de los Apóstoles en dar su sangre por Cristo y por el Evangelio, y le rogamos su intercesión y ayuda”.
“Quisiera proponer una relectura de nuestra historia, para recuperar nuevamente la riqueza de los valores cristianos que nos dieron existencia. Invito además a mirar alrededor, a las cosas nuevas que nos rodean y en las que, por así decirlo, nos hallamos inmersos. Invito, por último a mirar al futuro, cargado de incógnitas, pero también de promesas. Incógnitas y promesas que interpelan nuestra imaginación y creatividad, a la vez que estimulan nuestra responsabilidad, como discípulos del único maestro, Cristo”.
También indicó: “Si bien hemos avanzado mucho en estos últimos años, nos queda recorrer nuevos desafíos y alcanzar nuevas metas. Lo bueno es que la comunidad ha decidido crecer en la oración personal y en la participación poniendo en marcha la Capilla de la Adoración Perpetua. Sin dudas, Dios nos está iluminando para que lo encontremos y lo reconozcamos».
Más adelante informó que tras la puesta en marcha de la Capilla de la Adoración Perpetua se hará un Encuentro Diocesano de Formación.
«El Espíritu Santo será el Gran Maestro y allí hablaremos sobre la experiencia alcanzada. En octubre daremos nuestros testimonios y en adelante nos prepararemos para la gran fiesta final y así darle apertura al Año de la Fe», explicó Polti.
Tras la misa el obispo encabezó la procesión, al rededor de la plaza Belgrano, llevando consigo al Santísimo Sacramento y acompañado por las imágenes de Santiago Apóstol y la Virgen María.