«Cuántas veces cuando nos encontramos delante de los refugiados y prófugos y nos molesta», agregó Francisco tras la lectura de un fragmento del Evangelio de San Lucas
En ese marco, criticó que cuando aparecen «la indiferencia y hostilidad, vienen después la agresión y el insulto también. Decir ‘aléjenlos de acá, pónganlos en otro lugar'».
«La indiferencia y la hostilidad causan ceguera y sordera, que impiden percibir las necesidades de los hermanos y reconocer en ellos la presencia del Señor», criticó el líder de la Iglesia Católica.
Fuente: Telam