La victoria ante Aldosivi trajo algo de alivio en River después de semanas tumultuosas. Sin embargo, a pesar del buen partido ante el Tiburón y la ilusión de pelear por el torneo local, la gran cuenta pendiente de Marcelo Gallardo en su exitoso ciclo en el Millonario, las dudas en relación a la continuidad del DT es lo que se sigue llevando todos las miradas y mantiene en vilo a los hinchas.
El Muñeco finaliza su vínculo con el club en diciembre y, si bien en otras etapas su futuro también estuvo en veremos, la situación actual parece tener más fuerza que nunca, sobre todo después de los traspiés ante Boca en la Copa Argentina y Atlético Mineiro en la Copa Libertadores.
Su continuidad es una incertidumbre. Ni el entrenador ni nadie cercano a su persona se han pronunciado al respecto, más allá de que, como suele decir él, los balances y las decisiones las tomará a fin de temporada.
A día de hoy, la puja interna que haría dudar a Gallardo entre tomar una determinación o la otra se puede resumir de la siguiente manera: la razón le indica que es el momento, después de siete años, de dar un paso al costado, descansar y luego empezar a pensar en nuevos caminos para recorrer; no obstante, la pasión (por competir, seguir ganando y reinventarse), ese sentimiento que tanto ha caracterizado al técnico en su rol, le marca lo contrario, que tiene que seguir.
¿Qué pesará más en la balanza? Los próximos cuatro meses, quizás como nunca, el Muñeco no solo estará abocado a recuperar la imagen del River voraz e intenso que supo comandar hace no tanto tiempo, sino también a reflexionar acerca de su futuro…
Fuente: tyc sports
