Y un día, se llamó a silencio. Más bien, procuró no seguir generando tanto ruido… Así fue como Griselda Siciliani dejó de compartir en su cuenta de Instagram —con 1.2 millones de seguidores— aquellas selfies que armaban tanto revuelo. ¿Cuáles? A ver, por ejemplo…
Quizás como una coincidencia cronológica, las imágenes empezaron a copar su cuenta tras su separación de Adrián Suar en septiembre de 2016, y luego de ocho años juntos. Incluso, se desnudó para la portada de una revista. Pero la criticaron. Y mucho. «Ahora cada vez que subo una foto me pregunto si será ‘una foto hot’ o si ‘encenderá las redes’ o si será ‘el destape’. Bueh… Es lo que hay», se descargó por entonces Siciliani. Y lo dicho, se llamó a silencio.
Pero la actriz, quien por estos días ensaya para la obra Sugar, subió este viernes una imagen que supera a todas las anteriores…
En la intimidad de su baño, con una foto de la película Rocky en la cubierta del celular (muchos habían asociado esa imagen con el actor Esteban Lamothe, con quien se la relacionó sentimentalmente), llevando una toalla… ¡pero sólo en la cabeza!: así se tomó la selfie Griselda Siciliani.
«Testino, ponele», escribió al pie de la imagen, haciendo mención al estilo del fotógrafo peruano Mario Testino. Como si hiciera falta darle un contexto a su belleza…
