Como muchas otras figuras del espectáculo, Guillermina Valdés siempre intentó promover desde sus redes sociales un estilo de vida saludable y una actitud positiva frente a la vida. Sin embargo, a veces suceden cosas inesperadas que hacen que el cambio se de solo, como le sucedió a la modelo.
Al enterarse que su hija Paloma Ortega era celíaca, la alimentación de Guillermina dio un vuelco completamente distinto. Al recibir el diagnóstico de la adolescente, en el cual le confirmaron lo que ya sospechaban, la modelo se propuso hacer una transformación en su día a día para acompañar a su hija.
“Desde que me enteré que Paloma es celíaca no como glúten. Y me siento súper con eso. No soy de comer procesados, pero cuando me dan ganas consigo, por ejemplo, fideos de kale”, arrancó a contar a través de su cuenta oficial de Instagram.
Para inspirar a sus seguidores, dio un ejemplo de cómo es un plato típico en la casa de los Valdés: “Además, cocino el tofu con manteca clarificada y soja. Uso aceite de oliva, mix de semillas, cúrcuma…”.
Hace un tiempo, trascendió que Dante Ortega, otro de los hijos de Guillermina Valdés, estaba pensando en pasarse al vegetarianismo, tipo de alimentación que también practica su madre hace ya varios años. Se ve que, incluso dentro de su círculo familiar, ella intenta que los demás tomen conciencia del impacto de la industria ganadera.
Frente a la pregunta de una seguidora, donde le consultó si tenía pensado hacerse vegetariano o vegano, Dante respondió: “Sí, de a poco quiero ir dejando las carnes rojas. Ahora estoy tratando de comer solo una vez por semana”.
Pero Guillermina Valdés no solo informa a su familia, sino también a sus seguidores de Instagram. Desde allí, concientiza sobre el impacto de lo que consumimos en todos los aspectos: alimentación, vestimenta, productos de cosmética. El fin de semana, desde la provincia de Mendoza, explicó que hay que utilizar tapabocas reutilizables: “Tratá de usar mascarillas reutilizables, no descartables. El planeta te lo agradece”.
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