Guillermo Moreno, César Milani y el empresario Carlos Alberto Castelli, dueño de las marcas Todo Moda e Isadora, se asociaron para desarrollar una cadena de pancherías en todo el país.
La sociedad quedó plasmada el 11 de febrero tras la inscripción en la Inspección General de Justicia (IGJ) de la firma Tío Tola S.A, cuyo objeto social es «la explotación integral de bares, restaurantes, parrillas, pizzerías, confiterías y casas de comida», según la información publicada por el periodista Pablo Javier Blanco en el diarioClarín.
En diálogo con Infobae, el ex secretario de Comercio Interior informó que ya tienen un acuerdo con el hipermercado Jumbo para instalar la primera panchería en Parque Leloir, pero el proyecto es mucho más ambicioso: la idea es extender el negocio a todo el país.
«Castelli es un experto en negocios de consumo masivo y armamos la sociedad. ¿Qué tiene de malo que pongamos una cadena de pancherías?», preguntó el ex funcionario kirchnerista al ser consultado por el nuevo emprendimiento.
El titular de La Néstor Kirchner, corriente interna peronista que aspira a conducir el Partido Justicialista, admitió que durante los trámites de inscripción cometieron un error material en la dirección de la empresa, que figura en Santo Domingo 249 en vez de Santo Domingo 2468 . Esa situación será subsanada los próximos días con la presentación de una nota en la IGJ.
Esta semana, Moreno se presentó espontáneamente en los tribunales de Comodoro Py para notificarse personalmente de su procesamiento en la causa por el merchandising anti-Clarín. El ex funcionario calificó al juez federal Claudio Bonadio como un «sucio» y desde tribunales respondieron con una broma: «Mirá quién habla, Iván de Pineda».
Enojado por el tratamiento que le había dado Infobae a la noticia, el ex secretario volvió a criticar el «aspecto» del magistrado: «No es amigo del baño, tiene mugre abajo de las uñas, eso no queda bien para un juez de la Nación, aunque eso no tiene nada que ver con sus fallos, que pueden ser buenos o malos».