Acostumbrado a sacar una sonrisa a los santiagueños y al público de todo el país, «Pochi» Chávez está atravesando uno de los momentos más difíciles de su vida.
Mientras Esteban David «Pitu» Chávez (32) permanecía en Terapia Intensiva del Hospital Regional, los restos de Franco Chávez fueron trasladados a la Morgue Judicial para ser sometidos hoy a la correspondiente autopsia.
A la espera de los informes de los forenses, el padre de los dos jóvenes dialogó con EL LIBERAL y con resignación lamentó la muerte de su hijo mayor y exigió el máximo castigo para el autor del crimen.
«Es un momento muy lamentable, triste, no solamente para la familia, sino también para muchos amigos… era muy querido», dijo «Pochi» al borde de las lágrimas.
«No puedo contar nada porque no se cómo ocurrieron las cosas, son todos rumores y versiones», indicó sobre el hecho de sangre.
«Franco era muy querido por todos. Buen amigo, muy solidario, estaba a punto de recibirse y le faltaban tres días para cumplir sus 39 años, estaba a punto de ser padre. Le han truncado la vida», lamentó.
«Parecen cosas del destino, a veces uno ya nace con la muerte comprada, solamente no sabemos cuándo. No pasamos de ese día. Dios sabrá por qué», deslizó con la voz quebrada, quizás buscando explicación a lo inexplicable.
Sobre la situación de «Pitu», manifestó: «Tenemos un poquito el corazón en la boca. El médico nos explicó que pudieron detener el sangrado, lo entubaron y en caso de que no haya más pérdida de sangre, no va a ser necesaria otra cirugía». «Corre bastante riesgo, fue una herida bastante grave», agregó.
En cuanto a «Godinez», el homicida, aseveró: «Espero el máximo castigo. No sé si hago bien o mal en decir, pero vemos tantos casos mediáticos en los que la Justicia no está actuando como corresponde; espero que aquí sí, que se le dé la máxima pena, porque es un tipo que ha arruinado a la familia, a muchos amigos que hoy están dolidos y a todo un pueblo porque era muy querido», finalizó.
Fuente: el liberal
