El empate con Hungría había despertado las mejores sensaciones. La derrota con Suecia exigía dar vuelta la página y que se pusiera el foco en lo inmediato. Y pese a que se trató de un partido casi gol a gol, a Argentina se le escapó y, de repente, tras aquel gran primer paso el horizonte se llenó de oscuridad: la selección de handball cayó con Egipto 22 a 20 y quedó muy complicada pensando en el acceso a la segunda ronda del Mundial de Alemania y Dinamarca.
En un partido que nunca escapó a la paridad, las acciones fueron sumamente igualadas y de hecho Argentina apenas se fue un gol arriba al descanso (9-8). Pero Egipto salió con fuerza tras el entretiempo y no sólo se repuso, sino que dio vuelta un resultado que el equipo de Manolo Cadenas ya nunca podría alcanzar.
La desazón del entrenador español de la Selección, Manolo Cadenas, Sebastián Simonet y el asistente Guillermo Milano. (Foto: EFE)
