El pasado miércoles, luego de semanas de discusiones entre los dirigentes del fútbol argentino, se aprobó la realización de la Superliga, el nuevo formato del fútbol doméstico.
Aunque, en un principio, el vicepresidente de San Lorenzo, Marcelo Tinelli, se perfilaba como el indicado para estar a la cabeza del organismo que regirá el torneo, en las últimas horas se llegó a un acuerdo para que el cargo de presidente sea ocupado por el actual mandatario de Estudiantes de La Plata, Juan Sebastián Verón.
Daniel Ferreiro, vicepresidente de Nueva Chicago, confirmó que existe un»consenso entre equipos de Primera» para que «La Brujita» sea el titular de la Superliga, que comenzará el próximo mes de agosto.
«Me hubiera gustado Marcelo Tinelli, pero creo que se eligió a Juan Sebastián Verón y trabajaremos junto a él. Se lo eligió como candidato único y lo vamos a apoyar», sostuvo el directivo del «Torito» en diálogo con «El sueño de los héroes» por AM 750.
Tras afirmar que «cuesta mucho organizar una Superliga», Ferreiro hizo referencia a la reunión que se realizó el pasado viernes en Casa Rosada entre un grupo de dirigentes del fútbol argentino y funcionarios del gobierno nacional para llegar a un acuerdo por el dinero que el Estado debe girarle a los clubes por la televisación de los partidos.
«Nos parece que es muy baja la oferta del gobierno», señaló el vice de Chicago y argumentó: «El fútbol tiene un valor internacional y los derechos audiovisuales de una liga como la argentina ya tienen un valor marcado por el mercado. Estamos tratando de ver si el gobierno puede equiparar ese valor de mercado».
En ese marco, planteó que el contrato del Fútbol Para Todos «estaba atado al indec» y que este organismo «no reflejaba cifras reales», por lo que los montos están «muy por debajo» de lo que los clubes creen que deben percibir.
Ferreiro dijo también que la creación de la Superliga remite a que, desde la estructura de la AFA y su «multiplicidad de problemas», había dificultades para comercializar los derechos del torneo de Primera División y del Nacional B.
«Vendiendo esos dos torneos podemos, no solo tener más recursos para nuestros equipos, sino también para la AFA», recalcó y, en ese marco, aseguró que la entidad de la calle Viamonte seguirá cumpliendo «un rol importante» en cuanto a «la selección nacional, la oficina de jugadores, las transferencias internacionales, los árbitros, el Tribunal del Discplina y la junta médica», entre otras áreas.
