Alejandro Moroni, coordinador de la región centro de la Federación Empresaria Hotelera Gastronómica de la República Argentina (Fehgra), indicó a Cadena 3 que según un estudio realizado por el Gobierno, durante la pandemia cerraron unos 11.800 locales gastronómicos-hoteleros, lo que significó la pérdida de 80 mil puestos laborales.
«Dentro de las expectativas del sector y a pesar de ciertos movimientos que pusieron al rubro en jaque, la pospandemia se lleva bien, aunque el estado de situación general es complejo», manifestó Moroni.
Y explicó que, como la oferta es menor actualmente que hace tres años, hay una «buena ocupación», pero distribuida en menos plazas.
Por este motivo, desde la Fehgra buscan hacer un relevamiento personal del sector para «evaluar las cifras del gobierno y poder hacer un análisis más fino».
En este sentido, indicó que «muchos establecimientos han cerrado pero no han sido dados de baja», mientras que «otros van a trabajar específicamente por temporada», pero cerrarán el resto del año.
«Ha habido herramientas que han permitido transitar esta coyuntura, como el Previaje, pero no nos olvidemos que eso fue un crédito adelantado del sector para pagar deudas anteriores. Los que mejor parados quedaron es porque ha habido aportes al capital directo de los socios», explicó.
Destacó, además, que aquellos que solían vacacionar fuera del país, «este año eligieron los mejores lugares locales, por eso hay sectores del país que transitaron una temporada muy superior a la que esperaban».
«El resto, que son clase media, han hecho lo que han podido, con escapadas de mini turismo de tres o cuatro días. Son personas que a lo mejor no terminan de generar ganancias como para hacer vacaciones como antes», concluyó.
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