«ArcelorMittal se ha comprometido a completar esta transacción lo antes posible con el fin de minimizar las perturbaciones en la mayor medida posible».
El mes pasado, el viceprimer ministro Roman Sklyar declaró a la prensa que Kazajistán estaba en conversaciones con posibles inversores que podrían hacerse cargo de la planta.
Agregó que el gabinete estaba descontento con el hecho de que ArcelorMittal no cumpliera sus obligaciones de inversión, no mejorara los equipos y no garantizara la seguridad de los trabajadores tras una serie de accidentes mortales.
(Reporte de Olzhas Auyezov; Editado en Español por Ricardo Figueroa)