Las lluvias caídas este martes en Bariloche y alrededores, sumado a la baja de las temperaturas, ayudaron a la tarea del combate del fuego y permitieron el acceso a los brigadistas a otros sectores del incendio forestal en las cercanías del Lago Steffen, que se inició por la caída de un rayo el pasado 7 de diciembre.
Al respecto el intendente del Parque Nacional Nahuel Huapi, Horacio Paradela indicó que “las precipitaciones han sido leves pero constantes en estas horas y han producido que se reduzca el comportamiento activo del frente del incendio”.
Según informó Télam, la temperatura bajó en las últimas horas a 13 grados en las zonas afectadas por el fuego, ubicadas a unos 60 kilómetros al sur de Bariloche.
El funcionario agregó que las lluvias “han permitido que los brigadistas ahora pudiesen empezar a trabajar en distintos sectores y que efectivamente sea una oportunidad para controlar el sector principalmente este, el que está en la Ruta 40, y el cercano al Cerro Áspero sobre el río Villegas”.
Y remarcó que “esto también permite que podamos constituir esto en una oportunidad para controlarlo y así también poder, luego, trabajar con todo el personal en el sector oeste de manera más contundente una vez que lo permitan también, justamente, las condiciones para el acceso a ese lugar”.
El incendio forestal en la zona del Lago Steffen–el más importante en lo que va del siglo- ya afectó a cerca de 5.000 hectáreas y hace más de un mes y medio que los brigadistas trabajan para controlar el fuego.
De acuerdo con el reporte diario del Servicio Nacional de Manejo del Fuego, los incendios en Río Negro permanecen activos en el Complejo Lago Martín, donde se desplegaron 163 brigadistas y personal de apoyo convocados por el SNMF y Parques Nacionales.
Las zonas más activas están ubicadas en el Cañadón de la Mosca, afectando el cerro Cóndor, y en cercanías de la ruta nacional 40, y en el extremo del lago Martin, donde se inició el fuego el 7 de diciembre pasado como consecuencia de la caída de un rayo.
En Steffen y Lago Martin se trata de una zona de difícil acceso, teniendo la misma un solo camino de ingreso/egreso, con una pendiente de complejidad media, con un descenso de 400 metros en un recorrido de 7 kilómetros.
El único camino de ingreso es el referido, por lo tanto, es la única vía de evacuación para pobladores y combatientes. Esto hace que se desplieguen sólo los recursos que son factibles de evacuar en caso de un avance descontrolado del incendio hacia la zona de trabajo, precisó el COE.
La infraestructura vial de la zona no presenta daños, así como las viviendas y líneas de comunicaciones, abundó.
Por su parte, el Servicio de Prevención y Lucha contra Incendios Forestales (Splif) explicó que concentra sus tareas en atacar dos focos secundarios del incendio que se expandió hacia el Cañadón de la Mosca, porque llegó a jurisdicción rionegrina, a unos 100 metros del acceso al lago Steffen, cerca de la ruta nacional 40.
Se trata de los primeros focos que atravesaron la jurisdicción del parque nacional Nahuel Huapi, por eso el Splif desplegó sus brigadistas y prevé la instalación de un campamento en la zona para tener a los combatientes en el lugar, según precisó el jefe del Splif Bariloche, Orlando Baéz.
El campamento tendrá una infraestructura de carpas aportada por el Ministerio de Seguridad, con capacidad para 120 personas, con cocinas, duchas, baños e internet. Todavía no está definido si el campamento se montará en el predio de la Comisión de Fomento o en la escuela de El Manso.