El líder de la CTEP, Juan Grabois, confrontó al campo luego de que Dardo Chiesa, titular de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), advirtiera que el sector no está dispuesto a aceptar una posible suba de retenciones a las exportaciones, medida que analiza llevar a cabo el nuevo gobierno.
“Estamos absolutamente en contra y no las vamos a aceptar. Entendemos las urgencias, entendemos que existen, y habría que charlar un rato largo”, afirmó Chiesa este miércolesm que también alertó que si las retenciones a la soja son llevadas al 35%, el sector va a “desenchufar” la máquina de producir y va a haber desinversión. “Va a caer mal, no sé hasta qué grado vamos a poder parar a la gente”, indicó.
En una carta dirigida a Chiera y publicada en sus redes sociales, Grabois apuntó contra el campo. “Nosotros tampoco vamos a aceptar que un tercio de la población viva en la miseria mientras un puñado se enriquece con los bienes naturales en forma excluyente e insustentable”, afirmó el dirigente social.
“Hay fórmulas intermedias para resolver las contradicciones sociales en forma equitativa, en beneficio de los verdaderos productores rurales y la población urbana más pobre, en el marco de un proyecto de país dónde quepamos todos y el derecho a la tierra, el techo y el trabajo sea una realidad para el conjunto”, agregó.
Grabois le pidió a Chiesa que “las trasnacionales que sólo buscan sus propios intereses, no tienen patria, religión ni bandera” y le pidió no ir a “un choque que vuelva a dañar nuestro amado país”. “Para ninguno de nosotros el problema son los chacareros, los gringos de la pampa, los colonos”, señaló.
El dirigente social dijo que “el problema es con el 1% que concentra el 40% de la tierra, esos mismos que a ustedes los miran de arriba y se tapan la nariz si un chacarero pasa cerca del Jokey Club”.
“El problema son las diez empresas que concentran el 90% de las exportaciones. El problema son esos monstruos multinacionales, como me contaste, han patentado la vida y te quieren cobrar infinitamente por los cultivos que produce una semilla genéticamente modificadas”, afirmó.
Grabois le propuso a Chiesa hacer “un frente de unidad productiva, agraria y social contra los abusos de las semilleras, cerealeras y grandes terratenientes para alimentar al pueblo, repoblar la Argentina, cuidar la madre tierra, garantizar la mesa de los argentinos y conquistar la justicia social”.
En ese sentido, dijo que “a ellos, el 1%, no les importa, sólo piensan en sostener sus privilegios a costa del bien común y el futuro del país. A nosotros, sí”.