Eufórica, pero con mucho alivio por el resultado obtenido, Juana Viale llevó adelante este domingo el último programa del año de Almorzando con Mirtha Legrand. En el inicio, la actriz y conductora hizo el ingreso al estudio con el tema Par-Tusa de El Dipy, y no paró de bailar por unos minutos, mostrando su alegría de haber llevado adelante satisfactoriamente la animación del ciclo más longevo de la televisión.
“Ya está, terminamos, váyanse todos a la…”, disparó la joven conductora que durante nueves meses ocupó el lugar de su abuela durante las noches de los sábados y los mediodías del domingo. “Muchas gracias a todo este equipo maravilloso por haberme hecho el aguante de algo que no sabía hacer al principio”, continuó.
“No saben lo que significa estar detrás de cámara con una mina que no sabía preguntar. Era imposible sin hacerlo sin todos ellos”, manifestó Viale haciendo un autocrítica de la cual con el paso de los meses fue consolidándose en el rol que le tocó encarar en este difícil 2020, afectado por la pandemia de coronavirus.
Durante el ciclo, la conductora repasó los mejores momentos del programa. En el final, antes de despedirse y brindar, Juana Viale agradeció nuevamente a su equipo de trabajo y a sus seres queridos. “Gracias por todo el aguante por la compañía en todo lo que fue este año”, dijo. “Fue un año diferente, enorme gigante, de mucho aprendizaje y de mucho dolor, pero siempre hay que tratar de mirar para adelante”.
A continuación, la actriz se dirigió a un rincón del estudio en el que la esperaba un biombo. “Yo voy a empezar a retirarme porque terminé el ciclo maravilloso que me tocó vivir”, dijo y se prestó a sacarse su ropa de diseñador. A los pocos segundos, apareció otra vez en pantlla con una pollera de jean, una remera y con sus pies descalzos dando por terminado el ciclo.
“Esto es lo que soy yo”, expresó. “Esta es Juana Viale. Esto es un poco de lo que no mostré. Muchas gracias por acompañarme, la vida va a mejorar”, cerró y con un silbido hizo entrar a su perra Tota para retirarse juntas por la puerta donde todos los fines de semana hizo su ingreso triunfal.
Este sábado se emitió el último programa de La noche de Mirtha y durante la breve introducción Juana pasó por todos los estados. Bromeó con parte del staff sobre supuestos excesos navideños, le dedicó unas palabras a quienes no confiaban en ella y se emocionó hasta las lágrimas con un regalo de su padre.
Juana ingresó al programa al ritmo de La vida es un carnaval, de Celia Cruz, y con un imponente vestido amarillo diseñado por Gino Bogani. con tres capas de bordado. Primero mencionó la visita de Mirtha del último sábado, en un programa histórico que reunió a cuatro mujeres de la dinastía Legrand, ya que también participó su madre, Marcela Tinayre, y fue sorprendida por su hija, Ámbar De Benedictis. La actriz no se refirió a su reacción, que levantó tantas especulaciones, y se limitó a celebrar el breve regreso de Mirtha a la televisión: “Volvió la abuelita, estuvo increíble”, opinó Juana
A continuación, la conductora hizo un pequeño balance de su año al frente de los programas que conduce su abuela y que produce su hermano Nacho. “Gracias a todos los que nos acompañaron en este año raro, diferente, conmigo acá poniendo la voz y el cuerpo”, señaló Juana, que se hizo cargo de la conducción el sábado 21 de marzo. La actriz hizo extensivo el agradecimiento “a los que se sumaron” y también se guardó un palito para sus críticos. “A quienes no creían en mí, les tapé la boca”, señaló con un gesto alusivo.
En el último sábado del 2020 se sentaron a la mesa con Juana los humoristas Diego Pérez, Sergio Gonal y Jorge Carna Criveli y el ex futbolista Claudio Turco García, de revelador paso por Masterchef Celebrity. Este domingo cerró con un especial con lo mejor del año de uno de los programas más representativos de la televisión argentina que en 2021 iniciará su temporada número 54 al aire. A diferencia de los últimos años no habrá programas durante los meses de verano.
