«Poco serio». «Improvisación». «Inoperancia». A la oposición de Juntos por el Cambio no le alcanzan los calificativos para criticar el operativo del Gobierno para traer la vacuna rusa al país la semana próxima, pese a que el propio presidente ruso, Vladmir Putin, afirmó que su aplicación aún no está autorizada para personas mayores de 60 años, la población más vulnerable al coronavirus.
Los diputados del principal bloque opositor reclamaron que el ministro de Salud, Ginés González García, se presente al Congreso junto a la viceministra Carla Vizzotti -quien viajó a Moscú para acelerar las gestiones de compra de la vacuna rusa- para dar las explicaciones correspondientes. Si bien el pedido fue formulado el mes pasado, ningún funcionario de la cartera de Salud accedió a dar explicaciones.
«Estamos sorprendidos porque Vladimir Putin dijo que la vacuna rusa no se aplicará a mayores de 60 años. La viceministra ha viajado a Rusia y jamás comunicó esto. Es una vergüenza que no se le explique al Parlamento cuál es el estado de situación y mantengan todo con secretismos. Exigimos que las máximas autoridades de Salud asistan antes de fin de año a la Cámara de Diputados», enfatizó el radical Mario Negri, jefe del interbloque de diputados de Juntos por el Cambio.
El presidente de la UCR, el diputado Alfredo Cornejo, alertó que el Gobierno actúa con una «improvisación total» con el objetivo de «vender esperanza a los argentinos» con una supuesta campaña de vacunación inminente. El legislador adelantó a LA NACION que desde Juntos por el Cambio le propondrán al presidente Alberto Fernández la conformación de un comité con especialistas del oficialismo y de la oposición dedicada a elaborar una «estrategia eficaz» contra la pandemia ante un eventual rebrote.
Por su parte, la diputada Graciela Ocaña acusó al presidente Fernández y a su ministro de Salud de «hacer un uso político» de la vacuna.
«Pedimos que Ginés González García dé informaciones precisas sobre los contratos firmados por la vacuna contra el coronavirus. Da una impresión de improvisación», advirtió Cornejo. Ocaña reclamó que, además del ministro de Salud, se hagan presentes en el Congreso los directivos de la ANMAT y de la Comisión Nacional de Inmunizaciones (CoNaIn).
«Todo esto demuestra la inoperancia del Gobierno nacional en el manejo de la pandemia y la adquisición de vacunas», criticó Ocaña, quien agregó que «no se han comprado las vacunas que se aplican a los adultos mayores como la de Pfizer como si han hecho países como Chile, México, Estados Unidos, Canadá o Gran Bretaña que comenzarán la aplicación de esta dosis ya aprobada por distintos organismos mundiales».
Sobre este punto, Negri recordó que 6000 argentinos fueron voluntarios de la vacuna de Pfizer, pero el Gobierno debió admitir que no logró cerrar un acuerdo con aquel laboratorio.
«Es todo ineficaz y poco serio. Parece que prima la improvisación sobre temas tan sensibles como la salud en medio de la pandemia», manifestó Negri. «Chile está dando el ejemplo de cómo un presidente negoció, firmó él en persona un acuerdo con Pfizer y ya compraron las dosis».
En el mismo sentido se expresó el jefe de la Coalición Cívica, el diputado Maximiliano Ferraro. «El ministro de Salud y su equipo tienen que ser precisos y dejar de especular y jugar con las expectativas, salud y esperanza de las personas», reclamó.
