El último sondeo, difundido por el canal informativo BFM TV, sitúa al actual alcalde de Burdeos y ex primer ministro, con un 39% de apoyos, por delante de Sarkozy, quien cayó cinco puntos y se coloca con el 27% para la primera vuelta de las primarias, que se disputará el 20 de noviembre.
La mejor noticia para el ex presidente francés es que sigue siendo el preferido entre los simpatizantes de su partido Los Republicanos, con 37%, mientras que Juppé recabaría el respaldo del 32%.
En tercera posición se afianza el antiguo primer ministro de Sarkozy Francois Fillon, considerado por los analistas como uno de los triunfadores del primer debate entre los siete aspirantes del centro-derecha, que incluye a los conservadores de Los Republicanos y al centrista Movimiento Demócratico (MoDem), a ser su representante en las presidenciales de 2017.
El avance de Fillon relegó al autoproclamado «candidato de la renovación» Bruno Le Maire, quien, penalizado por su mal desempeño en el primer debate, solo recibiría el 11% de los votos en la primera vuelta.
El índice de participación estimado en este encuesta se eleva hasta un considerable 8% del total de votantes en Francia, es decir, más de tres millones de personas, lo que, a priori, debería beneficiar a Juppé, quien es percibido como un político de talante más conciliador y moderado que Sarkozy.
La lujosa sala Wagram de París -vestigio de los grandes salones de baile decimonónicos ubicado junto al Arco del Triunfo- será el escenario mañana a partir de las 20.30 hora local (16.30 en Argentina) del segundo de los tres debates entre los siete aspirantes, solo uno de los cuales, Nathalie Kosciusko-Morizet, es mujer.
Los temas que saldrán a la palestra son la línea política de los candidatos y qué tipo de presidente serían, la lucha contra el terrorismo y la delincuencia, el futuro de Europa y la educación.
En el primer debate, celebrado el 13 de octubre pasado, Sarkozy fue el principal blanco de las críticas de sus rivales, lo que permitió salir indemne al favorito, Juppé, a quien también las encuestas consideraron como vencedor.
Aunque el tono general fue distendido y de guante blanco, Sarkozy se encontró pronto en el centro de todas las controversias, obligado a responder a los otros seis postulantes, cuatro de los cuales formaron parte de sus gobiernos durante su paso por el Elíseo entre 2007 y 2012.
Las elecciones presidenciales francesas se llevarán a cabo en dos vueltas el 23 de abril y el 7 de mayo del año próximo.
Telam
