Como parte de la promoción del próximo de The Rolling Stones, Hackney Diamonds, el guitarrista Keith Richards brindó una entrevista al periódico británica The Telegraph, donde entre varios temas, habló sobre el efecto que tiene la música actual en él.
Y es que como el músico de 79 años que es, Richards no es fanático de los sintetizadores o sonidos procesados, por lo que, en primer lugar, el pop nunca ha sido particularmente de su agrado, considerándolo “música basura” que se construye de manera masiva y se deshecha fácilmente.
Las palabras de Richards no sólo fueron contra el pop, sino también contra el rap, que tomando en cuenta su postura sobre la música actual, era de esperarse que no fuera de su agrado, aunque tiene razones muy particulares para no tener ninguna canción de rap en sus listas de reproducción.
“No me gusta que me griten y me digan que es música, también conocida como rap. Ya tengo bastante con eso sin salir de casa”.
Otro de los temas que Keith llegó a tocar fue el de sus vicios. Durante muchos años, el nombre de Keith Richards era sinónimo de exceso, de hecho, a principios de los 70′s estuvo internado en una clínica de rehabilitación debido a su adicción a la heroína, mientras su esposa, Anita Pallenberg, estaba dando a luz a su segunda hija. Ese momento tan íntimo y complejo lo hizo escribir uno de los temas más emotivos y aclamados de The Rolling Stones: Angie.
Con los años, Keith logró dejar la heroína, apenas en 2019 logró deshacerse del cigarrillo que parecía encarnado en sus labios desde que el primer álbum de los Stones salió al mercado, pero con casi ocho décadas de vida, aún le quedan algunos vicios de los cuales disfruta como cuando tenía 20 años.
“Los cigarrillos los dejé en 2019. No los he tocado desde entonces. La heroína la dejé en 1978. Dejé la cocaína en 2006. Todavía me gusta tomar una copa de vez en cuando (porque no voy a ir al cielo a corto plazo), pero aparte de eso, intento disfrutar de ser heterosexual. Es una experiencia única para mí”.
Richards le adjudica a la suerte el seguir con vida después de todo el castigo al que ha sometido su cuerpo, además, confiesa estar en paz con la idea de tener prácticamente 80 años, una cifra a la que muchos le temen por las decenas de complicaciones que vienen con ella. Sin embargo, el mismo Richards asegura que puede haber otras opciones un poco más extremas.
“Quizá tenga la suerte de que físicamente esto siga funcionando. Esta cosa es el cuerpo al que ha infligido tanto castigo. Hasta ahora, no tengo ningún problema con envejecer. Hay algunas cosas horribles que puedes ver en el futuro, pero tienes que llegar allí. Me llevo bien con la idea de tener 80 años y seguir caminando, seguir hablando. Me parece un proceso fascinante. Pero si no fuera así, también podrías suicidarte”.
Y hablando de la mortalidad, Richards aseguró en 2018 que la única forma de detener a Sus Satánicas Majestades era sólo con la muerte. Esta llegó en 2021 llevándose consigo al baterista Charlie Watts, y a pesar de la dolorosa pérdida, la agrupación siguió adelante con un sucesor escogido por el mismo Watts. No sólo su gira siguió en pie, sino que además ya preparan un nuevo disco con el que probablemente, The Rolling Stones den el adiós definitivo a sus fanáticos.
“Charlie es tan parte de mí, y hemos sido tan parte de lo mismo, que aunque haya fallecido, sigo hablando con él cada vez que tengo una pregunta. Me pregunto: “¿Qué diría Charlie? Y espero la respuesta. Que hayas muerto no significa que estés acabado”, confirma el guitarrista.
Fuente Teleshow