Mientras el kichnerismo acusa al Gobierno por la ruptura del bloque del Frente para la Victoria en Diputados, en la Casa Rosada miran para otro lado. El jefe de Gabinete, Marcos Peña , negó que el presidente Mauricio Macri haya influido en la fisura que sufrió ayer la bancada que preside Héctor Recalde .
«Nosotros no nos metemos ahí. Fuimos siempre respetuosos», sostuvo el funcionario al ser consultado sobre la ruptura.
En una entrevista con el canal TN, el funcionario subrayó: «Lo que vemos y nos parece saludable es un debate dentro del peronismo». Según Peña, hay un grupo de legisladores que «tiene otra agenda» que la que sostiene el kirchnerismo.
Ayer, 12 diputados confirmaron su alejamiento de la bancada del FPV y armaron el bloque Justicialista. De esta forma, el Gobierno estará más cerca de conseguir el quórum en la Cámara de Diputados, donde el frente Cambiemos llegó en minoría.
El quiebre del FPV fue impulsado por el ex titular de la Anses Diego Bossio , por el gremialista de Smata Oscar Romero y por los tres diputados que responden al gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey , el más lejano a Cristina Kirchner .
Según Peña, «le viene bien a la Argentina y a las instituciones que más gente» se diferencie de la «postura negadora de la democracia y la realidad que ha tenido el kirchnerismo». En este sentido, vaticinó una «nueva etapa, donde tener diferencias políticas no signifique ser enemigos».
En una entrevista con LA NACION, la secretaria del bloque del FPV, Teresa García, acusó al macrismo por la fisura. «Sin duda, ésta fue una ruptura que promovió la Casa Rosada», afirmó.
La Nación
