Susana Giménez aclaró que su viaje a Montevideo, Uruguay, en plena cuarentena de coronavirus fue autorizado por la Cancillería y la ANAC, y que lo realizó para gestionar su casa quinta.
«Mandás un aviso a Cancillería, que te dice que sí podés viajar o que no, y me dijeron que sí, así que llamé a la compañía que uso normalmente y vine.Acá tenemos que pagar cosas, sueldos, todo. hace tres meses que no venia, es imposible no venir teniendo gente y animales a tu cargo,tengo jardinero, caseros, la gente tiene que cobrar. Yo soy como residencia porque tengo casa en Uruguay, me la dieron. Estaba muy preocupada y después de 65 días encerrada en mi casa sola, tenía derecho a venir acá, sobre todo porque pedí permiso», aseguró en declaraciones televisivas, para luego contar que de ahora en más tiene que estar 14 días encerrada sin poder salir.
Como siempre, Susana no esquivó las frases políticamente incorrectas: «Aparte yo me sé cuidar sola, no preciso que me encierren en mi casa con llave, yo me cuido sola y sé muy bien lo que tengo que hacer. 65 días me parece que ya está. Lo peor es que te digan 15 más, entonces ya…».
La diva también aseguró que no aterrizó en el aeropuerto de Punta del Este porque estaban arreglando la pista, y mostró su preocupación por el avance del coronavirus.
«Es terrible, cómo puede ser que haya 600 casos nuevos. ¿Y de dónde viene? ¿De la 31 o toda la Argentina? Dios santo… Lo único que se me ocurre es probar y rezar. Yo estoy viendo todo el día cosas y escuchando. Los médicos, pobres santos, ya sabrán lo que hacer. Están en primera fila de todo… Me da una tristeza, me rompe el corazón», manifestó, y llevó un mensaje positivo. «Lo único bueno es que se salva muchísima gente. Siempre están como asustando y no quiero eso. Hay que decir que se salvan», aconsejo.
Respecto a su situación particular, Susana aseguró que no tiene miedo. “No siento angustia, la verdad que soy una persona positiva y eso me protege de muchas cosas en la vida. No es una pose, nací así. No pienso en lo que me hace mal, me lo saco de la cabeza. No soy de angustiarme, de llorar. Soy una mina fuerte. Me hice sola desde los 18 años y hasta ahora. Es la vida. La vida es llevarte piedras todo el tiempo por delante. Te levantás y te caes.
De todos modos, también mostró empatía hacia el que no tiene ese beneficio ni sus privilegios de clase: “¿Cómo hace un tipo que tiene que laburar? Es muy difícil. Es lógica pura. No pueden pagar los alquileres, nada. Es muy complicado”.
Críticas políticas
«Los presos están en la calle ¿nosotros vamos a estar presos? Es el año más espantoso que estamos viviendo. El gobierno no sabe bien qué hacer. Hay barrios en los que no podés estar encerrado’. Es imposible que no se salga a tomar aire. La gente está harta. ‘Vamos a estar muy pobres, en default, económicamente re contra caídos, ya estamos acostumbrados a eso pero bueno de alguna manera hay que salir, hay que dar trabajo y tienen que cambiar muchas cosas», opinó.
