Boca Juniors derrotó 3 a 2 a San Lorenzo en un clásico vibrante en La Bombonera. Si bien ambos equipos llegaron a su compromiso con la cabeza puesta en Brasil, porque el Xeneize se medirá con el Cruzeiro por la revancha de los octavos de final de la Copa Sudamericana y el Ciclón hará lo propio con el Atlético Mineiro en la Copa Libertadores. Y más allá de que se tratará de un espectáculo con mayoría de suplentes, en el Alberto J Armando hubo emociones encontradas por la actuación estelar de Pablo Echavarría, el árbitro del duelo.
Es que en el primer tiempo, el combinado de Boedo jugó mejor y logró ponerse en ventaja a través de un penal de Andrés Vombergar. La mano de Marcos Rojo, dentro del área, debió revisarse por el colegiado luego del llamado de Gabriel Paletta desde el VAR. Y la diferencia pudo ser mayor cuando el delantero de raíces eslovenas cayó tras un golpe de Brey, pero en esa acción el colegiado optó por sancionar tiro de esquina. “Tengo una bronca terrible. No puede que se dé así un partido, que el árbitro cobre de esa manera. Hicimos un primer tiempo buenísimo, neutralizando al rival, teniendo la pelota, generando situaciones”, comenzó su análisis Leandro Atilio Romagnoli en la sala de la conferencia de prensa del mítico estadio porteño. Y en sus argumentos, el Pipi estalló contra la autoridad principal de la tarde: “El primer penal lo cobra, pero tarda como cinco minutos porque va al VAR a ver si hay alguna falta para Boca para anularlo. Eso es lo que hace. Quería ver si hay una falta porque no lo quería cobrar. Después hay un penal a Andrés y ni lo llaman para ir a verlo. Es un penalazo. Podía ser el segundo gol o el penal. Sabía que era penal y si lo iba a ver tenía que cobrarlo”.
“Como San Lorenzo estaba jugando bien y había hecho un buen primer tiempo, después empieza con las chiquitas. Entonces te empieza a meter al rival en tu propia área. Un empujón de Giménez a Romaña en el primer tiempo deja seguir y genera una situación de gol para Boca”, explicó el Pipi sobre las diferencias que notó en el complemento, cuando el Xeneize revirtió la historia gracias a las conquistas del ex delanero de Banfield, Marcelo Saracchi y Miguel Merentiel. “En el segundo tiempo cobra un empujón de Gonzalo, que después viene el centro y el gol. De a poco te va metiendo. Después una falta de un jugador a Boca al de San Lorenzo, juega rápido el de San Lorenzo y corta la jugada porque quiere amonestar. Y así todo el partido. La verdad es que así es muy difícil”, insistió.
A pesar de la derrota, el estratega aseguró que se fue conforme por la producción de su equipo. “Me quedo contento y tranquilo por el partido que hizo el equipo. Nos faltó definir en el primer tiempo, el rival las pocas que tuvo las metió adentro. No hay otro análisis. Me voy re caliente por lo que conté recién, pero ya está”. A pesar del descuento de Leguizamón, los tres puntos se quedaron en Boca. Al Ciclón no le alcanzó el peso de la historia para quedarse con el clásico. Y cuando todos los fanáticos lamentaron la actuación de Altamirano (responsable en el segundo gol de Boca) el DT lo respaldó y confió en que probablemente sea titular el próximo martes en Belo Horizonte, donde el Cuervo irá por una hazaña continental.