Lo que comenzó como una gran historia llena de gestos nobles y honestos, terminó siendo una estafa, en este caso moral. José Leandro Sánchez, es un entrerriano de 40 años, quien fue el héroe del día martes porque, según su relato, devolvió un maletín en el que habían 500 mil dólares, pero no sólo lo había devuelto sino que además no quiso aceptar la recompensa de 1 millón de pesos que le ofrecía Gustavo Schulz, el supuesto dueño.
«Siendo las 20 horas del martes, estoy en condiciones de decir que todo es mentira», el que afirma esto es el fiscal de Nogoyá, Federico Uriburu, que intervino en la causa e investigó el caso y terminó de confirmar que todo es una estafa.
«No hay empresario, ni camioneta, ni maletín, ni dólares ni revólver. Nadie vio nada». Para fortalecer sus dichos, el fiscal detalló: «La policía caminera en ningún momento visualizó una camioneta Chevrolet S–10, de color rojo, doble cabina, como la que describe Sánchez, y las cámaras de seguridad de la calle Paraná, donde encontró el maletín, no muestran absolutamente nada».
Y argumentó: «Hay cuatro que apuntan perfectamente hacia la zona que él describió y no se advierte nada, tampoco ningún movimiento extraño. No tiene correlato lo que dijo con lo que se pudo corroborar».
El fiscal de Entre Ríos completó diciendo: «lo que contestó es poco creíble, con detalles confusos, como cuando describió al presunto dueño de la plata, lo que no quedó muy claro.
EL Tribuno