La intención del grupo de clérigos es manifestarle a Francisco «directamente los problemas existentes en Venezuela«. El primer vicepresidente de la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV), monseñor Mario Moronta, informó en rueda de prensa que el Papa ya conoce los problemas que atraviesa el país.
«Él suscribe todo lo que los obispos venezolanos decimos. Será un compartir y recibir (…) Con nuestra presencia ratificaremos nuestra comunión con el Papa, quien siempre ha mostrado una seria y decidida preocupación por Venezuelaque agradecemos de todo corazón», dijo.
El vicepresidente del episcopado venezolano dijo que en la reunión harán «sentir la voluntad de libertad, justicia y paz de todo» el pueblo «golpeado por la crisis que vive la nación«, enfatizó.
Desde hace cuatro años, Venezuela atraviesa una crisis económica que reviste escasez de medicamentos, alimentos básicos y fallas en servicios e infraestructura, por la que en múltiples ocasiones diversos voceros venezolanos han instado al papa Francisco a solicitar la apertura de un «canal humanitario» para colaborar con los ciudadanos afectados.
El Papa aceptó la renuncia del arzobispo de Caracas
El papa Francisco aceptó la renuncia del obispo de Caracas, el cardenal Jorge Liberato Urosa Savino, tras cumplir los 75 años, edad de jubilación de los prelados, informó la oficina de prensa del Vaticano.
En espera de que se nombre un nuevo titular de la diócesis de la capital venezolana, Francisco nombró administrador apostólico al actual Arzobispo de Mérida, el cardenal Baltazar Enrique Porras.
Urosa Savino nació el 28 de agosto de 1942 en Caracas, fue obispo auxiliar de esta diócesis entre 1982 y marzo de 1990, cuando Juan Pablo II lo nombró arzobispo de Valencia, capital del noroccidental estado de Carabobo.
En 2005 fue nombrado arzobispo de Caracas y en marzo de 2006, el papa Benedicto XVI lo nombró cardenal.
Baltazar Porras nació en Caracas el 10 octubre de 1944 y fue ordenado sacerdote el 30 de julio de 1967 y estudió teología en la Universidad Pontificia de Salamanca en España y diez años más tarde obtuvo el doctorado en teología pastoral.
Fue nombrado arzobispo de Mérida en 1991, después de ejercer como obispo auxiliar de esa misma ciudad desde 1983 y entre los años 1999 y 2006 ejerció el cargo de presidente en la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) y un año más tarde asumió la vicepresidencia del Consejo.
El papa Francisco lo nombró cardenal en noviembre de 2016.
Fuente: Infobae