Cuando termina el show, los cruces mediáticos, la exposición, las nuevas oportunidades, los duelos y las sentencias, lo que quieren todos los participantes del “ Bailando por un sueño” se encuentran al final del camino y es siempre lo mismo: levantar la copa.
La edición más corta en la historia del reality más visto de nuestra pantalla chica llegará a su fin este jueves y dará con la pareja ganadora del certamen, consagrada como campeona del año e invitada a defender el título en la próxima temporada, de existir una. Hace poco, el 3 de septiembre, en que la fastuosa apertura servía de puntapié inicial de la competencia, era imposible predecir quién se habría de quedar con el esperado título.
Incluso estos últimos días, cuando las semifinales eliminaron a las parejas de Micaela Viciconte y Nacho Saraceni y Mery Del Cerro y Facu Mazzei quedó claro que no había favoritos y que cualquiera puede imponerse en este último tramo. Pero ahora el ring final ya tiene a sus contrincantes.
Por un lado, Jimena Barón y Mauro Caiazza se afianzaron como pareja de baile gala a gala, demostrando mucha química y sensualidad para moverse por la pista. Al punto en que, una vez hecho “el duelo” del fugaz romance televisado entre “La tonta” y el novel actor Rodrigo Romero, Jimena dio vía libre a sus sentimientos por su partenaire en la danza, de quien es pareja hace ya dos meses.
Fue esa chispa todavía viva entre ellos la que impulsó las popularmente llamadas “previas” al baile de Caiazza y Barón, con las que se hicieron de un público fiel que los sigue cada noche en la TV y las 24 horas desde las redes sociales.
En la otra esquina, los esperan Julián Serrano y Sofía Morandi, revelación en todo sentido. La pareja más joven del “ Bailando 2018” se llevó puestos a todos. Con una fama avasallante a la hora de encontrarse con otros participantes en el teléfono, los ídolos teen oriundos de las redes sociales -donde tienen millones de seguidores- se hicieron de un lugar en la pantalla chica a fuerza de gracia y carisma.
Evitando elegantemente los conflictos mediáticos, Morandi -comediante en su cuenta de Instagram- y Serrano -youtuber de primera camada- dinamizaron la pista con una propuesta clara y concisa: mostrarle a la gente, a través de Marcelo, lo que es pertenecer al mundo adolescente millennial; desde el trap y los bailes hasta los neologismos inentendibles.
En la ardua semifinal, “Serrandín” como se lo conoce al dúo, venció a Viciconte con el 57,98%, mientras que los enamorados eliminaron a Del Cerro y Mazzei con el 58,42%. Al enfrentarse esta noche en la final, las duplas tendrán que demostrar talento y excelencia en cuatro ritmos que ya conocen: disco, cha cha pop, salsa y tango. El jurado los evaluará de acuerdo a su performance, pero el veredicto final lo dará, como siempre, la gente, apoyando a quien crea merecedor del galardón a través de su voto.
