Las audiencias orales son esenciales para agilizar los procesos penales y dar respuesta en plazos de tiempo acotados para quienes son partes en ellos, principio que es fundamental para el éxito del Sistema Penal Acusatorio.
Así lo expusieron dos Funcionarios Nacionales que dictaron un Curso Intensivo sobre Litigación Oral, cuyos destinatarios fueron Jueces de Control y Defensores Oficiales en lo Penal, bajo la organización del Centro Único de Capacitación “Dr. José Gorostiaga”.
Se trata del doctor Fernando Jury, funcionario de la Secretaría de Apoyo a la Coordinación Jurisdiccional dependiente del Ministerio Público Fiscal de la ciudad de Buenos Aires y del Dr. Adrián Berdichevsky, Juez del Tribunal en lo Criminal Nº 5 de San Martín.
El primero de ellos destacó la importancia de compartir experiencias que se enmarcan en un sistema en el que oralmente se ve al juez participando con la inmediatez de la prueba, lo que conlleva a que la gente pueda comprender el contexto y qué está pasando judicialmente, al tiempo que se visibilizan los roles específicos del Fiscal y del Defensor.
“Es un Sistema mucho más transparente para la sociedad, con todo lo que eso implica. La sociedad ha aceptado la oralidad muy bien, pero a los propios operadores del sistema, aún les cuesta adaptarse”, sostuvo.
En este sentido, especificó que es difícil instalar una nueva forma de trabajo en aquellos agentes judiciales que hace muchos años se desempeñan de una manera determinada.
“El cambio hacia esa nueva metodología es difícil, pero podemos decir que la acogida ha sido, en general, favorable. También se debe a que contamos con muchos Fiscales, Defensores y Jueces jóvenes a lo largo del país, que es la sangre nueva que se necesita”, agregó.
Por otra parte, ambos letrados coincidieron en que las principales ventajas del nuevo Código están dadas porque todo se resuelve en una audiencia. Esto significa que los tiempos son menores porque los operadores del sistema (Juez, Fiscal y Defensor) actúan en conjunto y directamente sobre el conflicto, con lo que se brinda una respuesta concreta.
A diferencia del viejo sistema mixto, en donde se combinaba lo escrito con la oralidad y los operadores se juntaban en el plazo de uno o dos años, con el Sistema Adversarial interactúan al poco tiempo de haberse producido el hecho delictivo.
“Si existe la posibilidad, el conflicto se resuelve. Caso contrario, nos trasladamos a la etapa de juicio oral, pero es mucho más claro entender la función de cada uno de los operadores”, afirmaron los funcionarios nacionales.
Una respuesta integral
En tanto, el Magistrado penal bonaerense resaltó que la conflictividad social merece un abordaje muy importante porque deriva en hechos ilícitos.
“El desafío que tenemos es buscar una forma más ágil y respuestas completas para lograr la paz social. Estos sistemas de oralidad tienden no a resolver el delito, sino a dar una respuesta lo más integral y más rápida posible a la sociedad, donde debemos tener en cuenta que la reforma judicial es un punto importante”, señaló.
Por su parte, Jury opinó: “En lo que respecta a los delitos, hay un tronco común, que es el narcotráfico. Antes se veía en determinados lugares, pero hoy está en todas las provincias y en los pueblos. Es el principal problema a partir del cual surgen otros delitos conexos que, a su vez, dan lugar a delitos de mayor gravedad”.
