Por Miguel Coria. Especial para LA BANDA DIARIO
Desde mi modesto lugar de difusor y con el respeto hacia todas las instituciones culturales, literarias, escritores, artistas, bardos populares y creadores del género, me atrevo a definir este año 2019, como el “AÑO DALMIRIANO”.
Culturalmente es un año insoslayable, debido a que el próximo diecinueve de Julio se cumple el Centenario del Natalicio del laureado poeta, escritor, historiador, narrador, guionista, pensador, periodista y relator Dalmiro Coronel Lugones.
Dalmiro fue un versificador lírico cuyo valor traspasó el límite de la creación. Su obra persiste y resiste los embates del tiempo, constituyéndose en uno de los poetas que nos ha cedido a todos los que amamos su obra una riqueza cultural fruto de su talento natural.
Vislumbro un porvenir desde su prosa. Abrevo las fuentes autóctonas.
AbundÓ en el sentimiento del santiagueño y nos sedujo mostrándonos la belleza y el sentimiento de la poesía. No merece el olvido, y mucho menos de su ciudad, “Cuna de Poetas y Cantores”, antiquísima comarca, tierra que vio nacer a innumerables hombres y
mujeres que mostraron hidalguía, lealtad, espíritu rebelde, enriqueciendo con los años
el “ser bandeño”, ese concepto de personalidad que nos identifica mas allá de los
tiempos.
Desde mi modesta visión, Dalmiro Coronel Lugones, es insuperable y eterno. En cien años todavía su obra es invencible. Su exquisito vocabulario, sin eufemismos, deseable, sobresaliente, enriquecedor, superlativo, sútil, sigue descollando y preconizando las principales condiciones del arte.
Entonces no podemos pasar por alto este año. Como santiagueños que amamos lo nuestro debemos rescatar y recordar a nuestros artistas que organizaron y orientaron el camino del ingenio regalándonos su estado de ánimo, sus emociones, sus sensibilidades, sus luchas, su sabiduría, para compartirla y trasmitirla a través de sus obras.
Sin duda, será el año “DALMIRIANO”. Estoy seguro que Santiago no dejará pasar este año sin recordar al gran Dalmiro. Una pléyade de jóvenes poetas y músicos lo rescatan desde ese horizonte poético tradicional donde confluyen las perspectivas positivas convencionales, a las que el laureado poeta bandeño nunca renuncio.
Dos obras se editarán este año con sus trabajos inéditos para conmemorar dicha fecha, que se unirán a las cinco anteriores para completar una antología de textos extraordinarios que recogen el libre pensamiento nacionalista que Dalmiro jamás abandono.
En su sueño eterno su arrojo visionario sigue vivo marcando la huella referencial de las nuevas vertientes poéticas argentinas, y esa valorización nos permite hoy observar diversos poemas neoclásicos sin controversias, que reivindican la poesía
Dalmiriana.