A Jennifer Lopez, a sus 47 años, le encanta presumir con su imagen en las redes sociales. El problema es que para alcanzar la perfección recurre al uso de retoques digitales, a veces en exceso y llegando al ridículo.
En una selfie que subió a Instagram busco exhibir sus abdominales. Un detalle que llamó la atención de la fotografía es que en uno de los costados de la cintura falta un pedazo, lo que evidencia el uso de Photoshop.