La posibilidad de un paro de colectivos en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) existe desde noviembre. El pago del aguinaldo es el puntapié del conflicto, pero la estructura de costos, la base. Si bien la bomba momentáneamente se desactivó, los empresarios advierten que así “caerán empresas” y, por ende, unidades de transporte.
Según explican desde el sector privado, por primera vez desde 2009 la Secretaría de Transporte interrumpió la actualización de costos del sistema, que sirve para determinar el nivel de subsidios.
“El Gobierno actualizó los costos hasta el mes de octubre -con precios para los insumos de julio-, pero no hizo lo mismo en noviembre, diciembre y enero, donde cae la negociación paritaria”, explica una empresa a este medio. Desde la Secretaría de Transporte niegan tal cosa y aseguran que se encuentran en diálogo frecuente con las empresas.
Sin embargo, la versión no coincide con la del sector privado. Por el contrario, cuentan que la frase “no tenemos novedades” se apoderó del discurso del organismo.
Es que, según el sector, la estructura de costos acorde al arreglo paritario marca un boleto a $1300, pero actualmente se reconocen $900 entre tarifa y subsidios. Por eso, la novedad tendría que ver con incrementar las erogaciones para aumentar los subsidios o bien autorizar un incremento del boleto.
Ámbito