En el cierre de un año en el que varios ex funcionarios de la administración kirchnerista terminaron en la cárcel, la titular de la Oficina Anticorrupción (OA), Laura Alonso, destacó los progresos en las causas por corrupción y advirtió que en 2018 «se viene una catarata de juicios orales».
«Estamos viendo un avance impactante y no va a terminar acá», advirtió Alonso y se refirió a expedientes que están en proceso de instrucción como los que investigan la compra de gas natural licuado, los desvíos de fondos en el yacimiento de Río Turbio y los sobreprecios de Odebrecht.
La titular de la OA también anticipó que el próximo año habrá «una catarata de juicios orales». «La Oficina Anticorrupción, que está como está como querellante en Ciccone y en la segunda parte de Once, está contabilizando unos cinco o seis juicios más sin contar el de la obra pública y la ruta de dinero K». Entre esas causas mencionó aquellos que protagonizan los ex funcionarios José López, César Milani, Romina Picolotti y Ricardo Jaime.
En una entrevista que concedió a TN, Alonso cuestionó que el juez Sebastián Casnello haya rechazado llamar a indagatoria a Cristina Kirchner en la causa conocida como «la ruta del dinero K». La OA y la UIF hemos planteado junto a Marijuán que el juez debe llamarla a indagatoria. El dinero lavado por Báez es de Cristina Kirchner y ella tuvo que ver directa o indirectamente en esa maniobra, sin embargo el juez se niega». «En otras causas ha trabajado bien, en esta pareciera que no se atreve a indagarla», opinó.
Al hablar sobre la situación de la senadora Kirchner, la funcionaria sostuvo que sus fueros «no impiden que las causas avancen» y agregó: «Es triste que el Senado parezca una guarida de corruptos, será que todavía le falta a la política argentina madurar en ese aspecto…».
También se refirió a la remoción del juez Eduardo Freiler por parte del Consejo de la Magistratura y consideró que «no alcanza» con su desplazamiento: «Debe ser sometido a un proceso de enjuiciamiento por enriquecimiento ilícito, que está comprobado». En este marco, apuntó: «La justicia va a empezar a cambiar y a demostrar que cambió cuando no solo tenga la capacidad de investigar sindicalistas, políticos y empresarios sino también de investigar y sancionar a sus pares cuando corresponde».
