Comenzó con Lizy sola, en la verdulería. Luego entró Susana, como personaje. Las dos dijeron ser “socias” y se pusieron al frente de la atención al público del local.
Primero, ambas debatieron sobre el posible nombre del negocio. Entre chiste y chiste, Susana comentó: «Tiene algo de erótico la fruta».
«¡Mirá lo que es esta peluquería!», bromeó Tagliani quizás haciéndose eco de los rumores que decían que con Giménez encarnaría a un personaje del rubro en el que se desempeñaba antes de ser famosa.
Después, la comediante mostró cómo envolver huevos en papel de diario con chiste a colación.
La primera clienta fue Valeria Lynch. Lógico, la hicieron cantar.