La Federación de Conferencias Episcopales de Asia en un mensaje firmado por su presidente, el cardenal Charles Maung Bo, arzobispo de Yangon, en Myanmar, exhortan en un comunicado a “elevar oraciones especiales y bendiciones, a través de la intercesión de la Virgen de Lourdes –fiesta que se celebra hoy 11 de febrero-, por las víctimas del coronavirus que está golpeando el mundo, en particular nuestro continente asiático”, afirman en un comunicado.
Los obispos recuerdan que el virus se ha extendido a unos 30 países, provocando la mayoría de las víctimas en China, pero encontrando casos en casi todos los países de Asia.
“En este momento crítico, queremos estar cerca y orar por los fallecidos, y por los hermanos y hermanas que están enfermos a causa de este virus que se ha extendido a China y al mundo. Que el Señor reciba a los muertos en su paz, consuele a las familias y apoye el gran compromiso de la comunidad china que ya se ha movilizado para combatir la epidemia”.
“Hacemos un llamamiento a todos los obispos de Asia para que encomienden a todas las víctimas del coronavirus a Nuestra Señora de la Salud, Nuestra Señora de Lourdes, a quien celebramos el 11 de febrero”, se lee en el texto.
“Rezamos para que nuestra Santísima Madre intervenga y ayude a prevenir una epidemia mundial. Pedimos fervientemente su protección materna para detener la rápida propagación de este virus mortal, para dar esperanza y coraje, imponiendo sus manos milagrosas para la curación de los enfermos”.
El texto concluye: “En estos trágicos momentos, que nuestra Madre María, que estaba al lado de la cruz de su hijo moribundo Jesús, sea el pilar de la fuerza y el faro de esperanza para los trabajadores de la salud que arriesgan sus vidas para salvar la vida de las personas contagiadas”.+
AICA