El decreto que firmó Alberto Fernández sobre los planes sociales estuvo lejos de conformar a las organizaciones. A pesar de que consiguieron manejar el 30% de la obra pública nacional por menos de $300 millones, el Gobierno les prohibió renovar los planes sociales que se den de baja y abrir nuevos cupos y no hubo novedades sobre su gran objetivo: el monotributo social.
“A partir de la entrada en vigencia del decreto no se otorgarán nuevas altas en los programas Potenciar Trabajo, Potenciar Inclusión Joven, Nexo y Plus Esencial. En su lugar, las transferencias previstas serán destinadas a las unidades de gestión productiva para la adquisición de bienes de capital y la inserción laboral”, informó el Gobierno.
El Presidente firmó el decreto durante una reunión con los ministros de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz; de Trabajo, Raquel “Kelly” Olmos, y de Economía, Sergio Massa, y el jefe de Gabinete, Juan Manzur.
El decreto también otorga en favor de las Cooperativas de Trabajo de la Economía Popular el 30% de la Obra Pública Nacional con montos de hasta $300 millones, bajo la modalidad de contratación que corresponda. Además, instruye a la Oficina Nacional de Contrataciones a priorizar a los oferentes que acrediten un mínimo del 5% de trabajadores vinculados al programa “Puente al Empleo”.
Aunque el Gobierno asegura que esta decisión “se dio en un marco de acuerdo con los movimientos sociales”, las organizaciones piqueteras no oficialistas se advirtieron que “agrava” el conflicto y confirmaron la realización de una masiva movilización con posibilidad de acampe, la semana próxima frente al Ministerio de Desarrollo Social.
Lo anunciaron los piqueteros más combativos, cercanos a la izquierda, como el Polo Obrero o las agrupaciones de Juan Grabois. Esos sectores piden más cupos en Potenciar Trabajo. Los movimientos albertistas, en cambio, insisten con el monotributo social.
Desde hace tiempo que en las organizaciones sociales oficialistas como el Movimiento Evita, Somos Barrios de Pie y la Corriente Clasista y Combativa comenzaron a surgir diferencias con la administración de Alberto Fernández. Aunque dicen que hay buena sintonía con el Gobierno, marcan que no “piensan igual” en todos los temas y que es necesario comenzar a dar una respuesta concreta a la pobreza.
Semanas atrás, Pérsico y Fernando “Chino” Navarro -del Movimiento Evita- se reunieron con el Presidente y el ministro de Economía, Sergio Massa, a los que les trasladaron la necesidad de implementar cuanto antes tres iniciativas clave para la economía popular.
Estas iniciativas consisten en legalizar a través de un monotributo productivo a unos 9 millones de trabajadores informales; incorporar a las cooperativas a los proyectos de obra pública nacional para motorizar el empleo, y trabajar en una resolución para que el dinero que se destinaba a todos aquellos beneficiarios del Potenciar Trabajo que fueron dados de baja durante las auditorías se redireccionen a recursos productivos de proyectos activos.
Pérsico alertó además sobre la “superposición de programas sociales”, que “nos ha llevado a una situación que en muchos casos es muy injusta”. Así lo explicó: “Por ejemplo, un carnicero con negocio en negro, que son muchos y venden la carne barata, a ese compañero le va muy bien y ese compañero sale en todos los cruces como indigente”.
Fuente: tn