El presidente Mauricio Macri estuvo esta mañana en Santiago del Estero y junto a parte de su gabinete y la gobernadora de la provincia, Claudia Ledesma, dejó inaugurados el acueducto Quimili-Los Juries, enmarcado dentro del Plan Belgrano , y un comedor de Margarita Barrientos en Añatuya, de donde es oriunda, a 200 kilómetros de la capital santiagueña.
Luego de la bendición de un sacerdote y de las palabras de bienvenida de Barrientos en la inauguración del comedor-albergue que lleva el nombre de su recientemente fallecido esposo, Isidro Antúnez, Macri dio un breve discurso en el que afirmó: «Los argentinos somos solidarios, somos buena gente y queremos tirar todos juntos del carro».
«No estamos condenados a nada. Cada uno, aportando su granito de arena, puede construir su propia historia. Hoy es este hogar, después un polideportivo, las cloacas para Añatuya y un montón de obras que estamos haciendo junto a la gobernadora», sostuvo el presidente, en una muestra de buena sintonía con la mandataria provincial.
«Lo central y fundamental es decirnos la verdad. Eso es lo que construye, aunque duela. Tenemos muchos problemas de pobreza y, por decirnos la verdad, los empezamos a corregir», agregó el Presidente.
Sobre el final de su discurso, el jefe de Estado destacó la importancia de la obra pública al afirmar que «cada obra da trabajo y cuando se termina transforma la realidad del lugar y la esperanza y la confianza crecen».
Despues de un almuerzo en el comedor de Barrientos, la comitiva presidencial se encaminaba a la localidad de Selva, limítrofe con Santa Fe, donde Macri visitará a Mabel Díaz, una vecina de dicha ciudad que le escribió por Facebook. El presidente luego la llamó por teléfono y le prometió que la visitaría.
Macri estuvo en suelo santiagueño justo en medio de una fuerte crisis interna de Cambiemos: el pasado lunes, un legislador local de Cambiemos, Jaime Díaz, le arrebató a la apoderada del partido, Felicitas Sacarafia, la carpeta con la lista de candidatos que debía ser presentada en el juzgado electoral. Y escapó.
En las últimas semanas se vivieron tensas situaciones en las filas locales de Cambiemos, más precisamente entre sectores del Pro y de la UCR local, con amenazas por lo bajo de renuncia de parte Marcelo Lugones, candidato a gobernador, en caso de no recibir apoyo político y económico, según fuentes de dicha fuerza.
El Presidente estuvo acompañado de la primera dama, Juliana Awada, y de los ministros Rogelio Frigerio (Interior), Carolina Stanley (Desarrollo Social) y Guillermo Dietrich (Transporte). Estuvo siempre junto a la gobernadora santiagueña Claudia Ledesma y su esposo, el senador nacional y ex gobernador Gerardo Zamora, de buen dialogo con Balcarce 50 e importante en la aprobación de leyes en el comienzo de la gestión macrista con los votos de senadores y diputados santiagueños.
El próximo 22 de octubre los santiagueños no sólo votarán en las legislativas nacionales: también elegirán gobernador, vicegobernador, diputados provinciales y comisionados municipales.
El Frente Cívico llevará como candidato a Gerardo Zamora y esta fuerza, en las primarias de agosto (PASO), obtuvo el 66% de los votos, sacándole más de 50 puntos a la segunda fuerza. Según los sondeo, esos números podrían mejorar y la diferencia podría ampliarse en octubre.
Leonel Rodríguez/ La Nación
