Dos cuidacoches pusieron una parrilla sobre la llama de un monumento que homenajea a los soldados marplatenses caídos en Malvinas y prepararon un asado. Un vecino del lugar captó el momento exacto en el que cocinaban y les sacó una foto para denunciar lo que estaban haciendo. Ahora un abogado los acusa de ‘daño calificado‘, delito que prevé penas de hasta cuatro años de prisión.
El monumento que se encuentra en la plaza San Martín, en el cruce de las calles Córdoba y Diagonal Norte, tiene 13 placas de granito rojo sobre las que están grabados los nombres de los caídos al lado de la fecha de muerte. Además posee mapa de las Islas.
Las placas están colocadas sobre una fuente circular unida por tres puentes y en el centro se encuentra la llama que permanece encendida las 24 horas en honor a los héroes.
Luego de que se conocieran las imágenes, el abogado Julio Razona presentó una denuncia en contra de los ’trapitos’, que aún no fueron identificados. El letrado acusó a los hombres de incurrir en el delito de ‘daño calificado‘. En ese sentido aseguró en declaraciones al medio local 0223: ‘Hay una invasión de esta clase de sujetos en Mar del Plata‘.
Razona entregó un escrito ante la Fiscalía General Departamental de Mar del Plata, a cargo de Fabián Fernández Garello, y pidió que se designe un agente y se inicie una causa penal contra los responsables. El delito por el denuncia acusa a los cuidacoches contempla una pena en expectativa de tres meses a cuatro años de prisión.
‘Deberá efectuarse una inmediata investigación a fin de peritar el monumento afectado, evaluar el daño ocasionado, e identificar a los autores materiales de este hecho‘, reclamó el defensor al tiempo que consideró que el episodio ‘no puede dejar de ser investigado atento al valor simbólico que representa‘ el espacio vulnerado y por la ofensa que representa para los 13 soldados marplatenses caídos en el conflicto bélico de 1982.
En ese sentido solicitó que se investiguen también las denuncias telefónicas que se reciben en la línea de emergencias 911 que estén relacionadas con la ‘actividad ilegal de los cuidacoches‘.
El Tribuno