El ingeniero Marcelo Lugones fue uno de los invitados a brindar su testimonio sobre la vida de monseñor Gerardo Seldo, en el documental «Gera, el obispo de los pobres» que fue dirigido por Francisco Coronel.
En oportunidad del estreno del trabajo cinematográfico, el ingeniero Lugones expresó a LA BANDA DIARIO: «Fui uno de los que brindó testimonio de lo compartido con monseñor Gerardo Sueldo, esos momentos de la vida en comunidad que se daba en Santiago del Estero. Lo he hecho como un santiagueño, más allá de los posicionamientos políticos, partidarios, sectoriales, de ser católico o no serlo».
También señaló: «Realmente él ha marcado una impronta muy grande en miles de santiagueños que todavía lo recuerdan. Cuando se dice profeta se habla de una persona que deja un mensaje en un momento determinado de la sociedad. Pasaron 21 años de su muerte y esas palabras siguen vigentes por eso siento que fue profético porque lo que él supo decir sigue teniendo la misma validez en esta realidad que golpea a Santiago».
Asimismo indicó que «si uno volviese a leer sus homilías se daría cuenta que no han perdido actualidad y eso es lo que nos cautivó, nos subyugó e hizo que lo siguiéramos».
Respecto a la muerte del obispo Sueldo, Lugones subrayó: «Sobre el final trágico de su vida, estoy convencido que no fue un accidente sino un siniestro vial que puede haber sido causado. Como ingeniero vial puedo decir que este tipo de siniestro pueden ser circunstanciales o intencionales y en ambos casos se pueden prevenir, por ello no se debe llamar accidente. El final de monseñor Sueldo siempre va a estar presente en la conciencia de cada uno de los santiagueños, más allá que se reabra la causa, que es uno de los motivos de este documental».
Finalmente comentó que este trabajo cinematográfico fue realizado con un doble objetivo, posibilitarle a Ariel Sueldo (sobrino del obispo) llevar al Vaticano el documental y un escrito para ver si se puede hacer la santificación y reabrir la causa.
