Casi 25 mil comercios que habían reabierto sus puertas hace 10 días deberán volver a cerrar como consecuencia de las medidas adoptadas por el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires en la etapa de la cuarentena que se inicia este lunes.
El número surge de estimaciones oficiales. Esta mañana, el vicejefe de Gobierno, Diego Santilli, graficó la situación en términos porcentuales: “El 30% de los comercios son de rubros esenciales, en los últimos días se había sumado otro 20% de locales; de ese 20, nosotros calculamos que el 11 va a tener que cerrar”.
Redondeando, el 40% de los locales barriales abrirá sus puertas. Seis de cada diez continuarán cerrados y hay quejas de las cámaras que representan a las pequeñas empresas, que generan 7 de cada 10 empleos en la Capital.
“Nosotros veníamos planteando desde que empezó la pandemia que había que seguir muy de cerca la curva de casos y lo que ha pasado en los últimos 15 días es que pasó de 83 a 400 casos por día. Esa es una multiplicación de 5 veces. Lo que hemos decidido es no pasar a otra etapa de apertura de comercios. y en las áreas de mayor aglomeración, que no es toda la ciudad, no permitir que se abran comercios en esos sectores que no sean esenciales”, informó Santilli.
A la par, las autoridades decidieron que todos los trabajadores de actividades esenciales vuelvan a tramitar el permiso de circulación. A la par, habrá más controles en las calles, prioritariamente en los ingresos y egresos de Captital.
Desde el martes 9 de mayo, los comercios minoristas como librerías, jugueterías, florerías, perfumerías, decoración, materiales eléctricos, electrodomésticos, instrumentos musicales y bicicleterías, podían abrir de lunes a viernes de 11 a 21 horas. También se habilitaba la venta de comida y bebida en formato “para llevar” en restaurantes, bares, cervecerías y otros locales gastronómicos de lunes a lunes a partir de las once de la mañana sin límite de horario de cierre; la construcción (solo excavaciones y demoliciones, de lunes a viernes, de 6 a 14) y la administración de escuelas privadas e institutos de formación no universitaria (desde las once de la mañana y sin horario de cierre). Además, regresaban en forma progresiva las ferias itinerantes de abastecimiento barrial (de 8 a 14 y de 15 a 21) con puestos ubicados sobre la calzada, más distanciados, con cierre de calles y demarcación.
El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires dispuso la anulación de esta medida en 29 zonas, entre polígonos, ejes comerciales y centros de trasbordo, que limitarán la actividad comercial a los servicios esenciales. El objetivo es evitar las aglomeraciones de gente en procura de disminuir las probabilidades de contagio. “Es en las zonas que representan el 80% de la aglomeración de gente en la Ciudad, como Once, Av. Avellaneda o la zona de Scalabrini Ortiz y Córdoba”, dice un documento oficial del gobierno porteño.