Los forenses determinaron, este martes, que María de los Ángeles Corbalán fue asesinada con cortes de hacha en la cabeza y cursaba el 7º mes de embarazo.
Así lo confirmó el fiscal José Alberto Piña, en las primeras horas de la tediosa investigación, en pos de develar por qué y cómo fue muerta la mujer, madre de nueve menores. Veinticuatro horas después del horror en el barrio Juan Perón, la policía realizó pericias en el escenario del crimen: Antenor Álvarez Nº 1115 casi República del Líbano, en La Banda. Intentando reconstruir las últimas horas de la víctima, Piña ratificó tres hechos significativos: «El sospechoso era pareja de la víctima»; «ésta estaría ligada a la noche» y «el hacha sería el arma homicida».
Continuó: «El médico de policía advirtió tres cortes en la cabeza que después se estableció corresponden al hacha secuestrada, escondida entre la mesada y la cocina». Ahondó Piña: «También divisamos cortes en los antebrazos y, lo más significativo, la víctima estaba embarazada entre el 5º y 7º mes», estimó.
Ello modificaría en parte la acusación, ya que la Justicia atribuiría al detenido, Martín Coronel Quisbert, de 41 años, «homicidio doblemente calificado por alevosía y femicidio», según se supo. Igual, Piña estimó que también podría enrostrársele el delito «de aborto». A criterio del funcionario, hoy o mañana arribaría el sumario y estará listo para tomar la declaración indagatoria del individuo. Éste, el martes continuaba alojado en la Comisaría 12, silencioso, irritado e imperturbable.
Fuente: el liberal