Este domingo juró Martín Llaryora en la Legislatura Unicameral de Córdoba como nuevo gobernador. Por la tarde, luego de asistir a la asunción de Javier Milei, tiene previsto el regreso a San Francisco, su ciudad natal, para recibir la banda y el bastón del gobernador por parte de Juan Schiaretti. Lo hará en el interior cordobés como señal de federalismo.
La asunción de Llaryora a la gobernación marca un hito en la política provincial. Si bien el sanfrancisqueño representa la continuidad de la gestión peronista, su ingreso al mando es símbolo del recambio generacional, luego de más de veinte años de alternancia entre Juan Schiaretti y José Manuel De la Sota.
Con el resultado de las elecciones en junio de este año, Llaryora llegó a la gobernación con el 45,20% de los votos. El mérito de haber ganado lo impulsó a coronarse como líder del peronismo que se viene. Acompañó a Juan Schiaretti en su carrera presidencial, en su discurso de asunción preponderó la gestión del gobernador saliente, enfatizando en darle continuidad a sus ideas de federalismo y progreso.
Renovación cordobesista
Uno de los pilares con los que Llaryora inicia su gestión es el de la apertura de su espacio político “Hacemos por Córdoba” a nuevos aliados de otros frentes. Schiaretti hizo punta al movimiento despegándose del kirchnerismo nacional y pregonando las bases para la conformación del peronismo cordobés, con pilares federales, que hoy busca liderar las cámaras legislativas nacionales.
El gobernador entrante llega con el concepto de Amplitud Partidaria, sumando a dirigentes de otros espacios políticos a su gestión. Esta expresión quedó plasmada en el armado de su gabinete y en su discurso de asunción. Tal es así que hoy asumió en la Vicegobernación Myrian Prunotto, dirigente histórica del radicalismo, y tres de sus ministerios serán encabezados por dirigentes de otras fuerzas.
A la dirigencia les dijo: “Con la humildad y la voluntad de sumar y seguir invitando a representantes de distintas expresiones políticas y sociales porque estamos convencidos que con las ideas de todos tomaremos las mejores las decisiones para enfrentar los nuevos desafíos que nos presenta la sociedad”.
Apoyo a Milei
Como gobernador electo, Llaryora compartirá el periodo de gestión 2023-2027 con el Presidente Javier Milei, a quien de dedicó parte de su discurso de asunción. La grieta entre esta provincia y los gobiernos peronistas nacionales no tuvo cese. El cambio de gestión en la presidencia y en la gobernación, abre una esperanza para que existan el diálogo y la reconciliación que se necesita para la unidad.
Llaryora dijo: “¡Vamos a acompañar al gobierno del presidente Javier Milei que hoy asume los destinos del país! No es tiempo de poner palos en la rueda, sino sumar para que finalmente la Argentina encuentre el camino del desarrollo y prosperidad que todos estamos esperando” y agregó “Debemos ser capaces de recuperar el diálogo, dejar atrás las grietas que tanto daño le han hecho a la Patria y al pueblo argentino”.
La frase resonante de “Los pituquitos de Recoleta” de Llaryora, luego de haber conseguido la victoria electoral para su candidato en la capital, fue la expresión joven y revolucionaria del grito del interior, de reclamar y trabajar por igualdad de derechos entre el AMBA y las provincias argentinas. Hoy, en tono moderado por la investidura que asumió, habló de fortalecer el federalismo y a rediscutir la distribución de recursos al interior.
Austeridad
El ajuste en el gasto público es uno de los cimientos del proyecto nacional que inicia con Milei. El nuevo gobierno de Córdoba se lanza con señales de cohesión, achicando el Estado en 14 ministerios y recortando los salarios de los funcionarios a modo de gesto. “La austeridad es una bandera de esta etapa histórica” les dijo Llaryora a los Legisladores, y agregó:
“La realidad nacional, los errores de la política económica que se profundizaron en los últimos meses, la recesión económica, la posibilidad, como digo el presidente, de caer en estanflación, nos obliga a ser responsables y tomar acciones para cuidar a los cordobeses”.
Con bases de soberanía y autonomía provincial, Llaryora dio certezas a los cordobeses diciendo que en esta provincia no recortará en salud, educación y en la obra pública, principalmente para los pueblos y ciudades del interior. “Aun en crisis, vamos a hacer todo lo posible e imposible, para que la obra pública no pare, la salud pública mejore y la educación pública sea un estandarte de calidad y progreso social para todos los cordobeses, vivan donde vivan”, acentuó.
Fuente Infobae