Rodeados por un fuerte operativo de seguridad, el presidente Mauricio Macri y el ex mandatario estadounidense Barack Obama mantuvieron un encuentro privado en el Buenos Aires Golf Club, en el partido bonaerense de San Miguel, para dialogar de manera «informal» sobre el vínculo entre ambos países y desafiarse sobre el césped. Desde las 10:30 y hasta pasado el mediodía, Macri y Obama jugaron al golf, y luego desde allí se trasladaron hasta la quinta «Los Abrojos», propiedad de la familia Macri.
El encuentro entre Macri y Obama se da en un clima de hermetismo, que continuará mientras el ex presidente norteamericano esté en el país. Sucede que, según pudo saber Infobae de altas fuentes de la Casa Rosada, Macri busca evitar que la visita sea leída como un apoyo a las críticas que Obama hizo a las políticas de Donald Trump respecto del cambio climático.
En efecto, en su paso por Córdoba para disertar en una Cumbre de Economía Verde, el ex titular de la Casa Blanca hizo declaraciones desafiantes contra el actual inquilino del Salón Oval, al afirmar que los Estados Unidos cumplirán con el Acuerdo de París «aunque el gobierno no haga nada».
Macri y Obama juegan al golf junto con otro Macri: Gianfranco, hermano del presidente, oficiará de anfitrión del encuentro, ya que es presidente el BAGC. También se encuentra el apoderado del PRO Pablo Torello.
En ese marco de distención, está previsto que el líder del PRO y el ex presidente de Estados Unidos dialoguen «de manera informal y privada» sobre el vínculo entre ambos países y el desafío que tendrá la Argentina en 2018, cuando asuma la Presidencia del G20. Tampoco se descartan conversaciones sobre distintos temas de política internacionales.
El viernes, Obama participó de una exclusiva cena junto a hombres de negocios, organizada por los empresarios Adrián Werthein y Lili Sielecki en el Palacio Duhau.
Desde su asunción al frente de la Casa Rosada, Macri mantuvo varios encuentros y contactos formales e informales con el ex titular de la Casa Blanca, con quien forjó un «buen vínculo».
El principal fue en marzo de 2016, cuando el estadounidense visitó la Argentina para mantener una reunión bilateral en Balcarce 50 y luego ambos viajaron con sus respectivas esposas, Juliana Awada y Michelle Obama, a la Patagonia.
Pocos días después de aquella histórica visita, volvieron a verse en Washington en el marco de la Cumbre sobre Seguridad Nuclear, así como en septiembre de ese año también dialogaron en la reunión del G20 que se llevó a cabo en la ciudad china de Hangzhou.
Una vez concluido su mandato como jefe de Estado estadounidense, Obama llamó por teléfono al argentino el pasado 24 de febrero, cuando el líder del PRO realizaba una visita de Estado a España. En esa ocasión, el demócrata le pidió disculpas por no haber podido vacacionar en la Patagonia.
