En un acto de campaña, May, líder del Partido Conservador, defendió la necesidad de «hacer más para restringir la libertad y los movimientos de sospechosos de terrorismo cuando haya pruebas suficientes para saber que suponen una amenaza».
«Si nuestras leyes de derechos humanos nos lo impiden, cambiaremos las leyes para poder hacerlo. Si soy elegida primera ministra el jueves, ese trabajo comenzará el viernes», indicó, informó la agencia de noticias EFE.
Tras el ataque que el sábado dejó siete muertos y 48 heridos en Londres -el tercer atentado en el Reino Unido en menos de tres meses-, la jefa del gobierno dijo que la policía y las agencias de inteligencia deben contar con los «poderes necesarios» para combatir una amenaza que considera «cada vez más compleja».
Por ese motivo, propuso restringir los movimientos de los sospechosos de terrorismo aún cuando «no haya suficientes pruebas para presentar una acusación completa ante un tribunal».
May defendió asimismo condenas más largas para los condenados por delitos relacionados con el terrorismo y «hacer que sea más fácil para las autoridades deportar a sospechosos de terrorismo extranjeros de vuelta a sus propios países».
Dos semanas antes del ataque del sábado, en el que tres hombres, entre ellos un británico, atropellaron y acuchillaron a multitud de personas en las inmediaciones del Puente de Londres, un atacante suicida mató a 22 personas tras un concierto de Ariana Grande en Manchester, en el norte de Inglaterra.
El 22 de marzo, otro islamista radical causó cinco víctimas mortales al atropellar a transeúntes en el puente de Westminster y apuñalar después a un policía.
Según el programa electoral de May, el Partido Conservador no se plantea abandonar la Convención Europea de Derechos Humanos mientras dure el proceso de salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE), pero prevé «considerar un marco legal propio de derechos humanos una vez concluya el proceso» del «brexit».
La dirigente conservadora activó el 29 de marzo el periodo oficial de dos años en el que Londres y Bruselas deben negociar las condiciones de salida de la UE, por lo que el proceso concluirá previsiblemente en marzo de 2019.
Ayer, el líder de la oposición laborista, Jeremy Corbyn, pidió la renuncia de May, acusándola de haber desfinanciado a la policía.
Antes de ser jefa de gobierno, May fue ministra del Interior durante seis años, y en ese lapso el número de policía se redujo en aproximadamente 20.000 agentes.
Fuente: Telam