«El que gana, conduce». En estos términos explicó Miguel Ángel Pichetto su expectativa de cara a las elecciones legislativas de 2017, una votación clave para el futuro del Partido Justicialista. Bajo esta idea, el jefe del bloque de senadores del Frente para la Victoria manifestó que si Sergio Massa se impone en esos comicios «va a ser el nuevo líder del peronismo de cara a 2019».
«Va a ser una elección importante, en donde los emergentes del resultado electoral indudablemente van a ser la conducción que va a emerger en el peronismo», amplió. Y remató: «El que gane en Provincia, si el peronismo hace una buena elección, emergerá con un liderazgo muy relevante».
Pichetto destacó, además, que el líder del Frente Renovador «es un hombre que tiene proyección, como también la tienen otras figuras jóvenes del peronismo, llámese Randazzo, Perotti, Bossio o gobernadores que han aparecido como Bordet, Uñac o el propio Urtubey».
En otro tramo del reportaje que concedió a Clarín, el legislador apuntó que durante este ciclo su bloque acompañó al oficialismo en iniciativas como «la salida del default, el pago a los holdouts, el blanqueo, el pago a jubilados, la ley de participación público privada». «Hemos acompañado los grandes lineamientos de la politica económica del Gobierno», insistió. «Si nosotros nos hubiéramos opuesto, nos dirían que bloqueamos», opinó.
En este marco, el senador argumentó que el acuerdo con los holdouts»era fundamental para tener acceso a los mercados, para que la Argentina se normalizara». Por otra parte, consideró que el blanqueo de capitaleses «una buena herramienta que puede tener un resultado positivo».
Consultado sobre la ley de reforma electoral, que ya tiene media sanción en Diputados, respondió que «el peronismo es un partido democrático, de raigambre popular y nacional, y no puede ir en contra del proceso tecnológico».
Si bien reconoció la desaceleración en la inflación que se registró en los últimos meses, el jefe de la bancada PJ-FPV señaló que «persiste en la economía una situación de recesión y de no reactivación». «Por ahora los datos económicos no son buenos. Esperemos que los recursos del blanqueo sirvan para inversiones que puedan reactivar», añadió.
Por último, dijo que es necesario que para 2017 el oficialismo negocie una serie de políticas de Estado con el resto del arco político: «El Gobierno debería colocar sobre el tablero una serie de temas que estén fuera de la discusión electoral, de lo contrario corremos riesgo de que el Congreso se paralice a mitad de año y no haya posibilidad de sancionar leyes que puedan resultar importantes para el país».
