Una importante cantidad de bandeños se volcaron masivamente a las parroquias para conmemorar el Domingo de Ramos. En esta jornada se recuerda el ingreso triunfal de Jesús a Jerusalen y además, comienza Semana Santa.
Al respecto el padre José, de la iglesia Nuestra Señora de La Salette en su homilía señaló, «Una vez, en un lugar dos hermanos estaban viviendo en una casa. El hermano mayor era un hombre justo, trabajador y tenía fe en Dios. Pero el hermano menor estaba viviendo de muy mala manera, siempre volvía a la casa muy tarde, drogado y alcoholizado.
Una noche el hermano menor vino corriendo a su casa con una pistola en su mano y su ropa estaba mojada con sangre. Entonces dijo a su hermano: “yo maté a un hombre y la policía está buscándome. Por esta razón, le pidió ayuda a su hermano para salvar su vida. El hermano mayor le amaba mucho, por eso cambió su ropa y se vistió con la de su hermano que tenía sangre y tomó la pistola, mientras la policía golpeaba la puerta. El hermano mayor aceptó la culpa de su hermano y fue a la cárcel y así lo salvó».
Seguidamente puntualizó, «hoy las lecturas nos compartieron la pasión y la muerte de Cristo. Cuando contemplamos sobre la vida de Jesús también vemos que es igual a la de este cuento. El hermano mayor sacrificó su vida para salvar la vida de una persona. En cambio Jesús sacrificó su vida para dar la vida para cada uno de nosotros. ¿Por qué él salvó nuestra vida? Porque él nos amó tanto a nosotros».
Agregó, «el domingo de ramos, significa la entrada de Jesús en Jerusalén montado sobre un asno. También recordamos los momentos de su gloria y el sufrimiento en la vida de Jesús. El momento de gloria significa que Jesús recibió una bienvenida de un rey y la culminación de su recepción fue la cruz».
El párroco prosiguió, «cuando conmemoramos el domingo de ramos, el desafío para nosotros es recordar el precio que el pagó para salvar nuestra vida. Cuando entró en Jerusalén, Jesús sabía que su tiempo ya había llegado a su fin y El veía todo con anticipación de lo que iba a suceder en su futuro. Por eso El no tuvo miedo al enfrentar la muerte. ¿Por qué los fariseos condenaron a Jesús a muerte? El no mató a nadie, en cambió les enseñó a la gente a amar a los demás y a sus enemigos. También El fue un signo de amor. Pero los fariseos decidieron matarlo porque las enseñanzas de El fueron como una amenaza para ellos. Jesús sabía que iba a morir en Jerusalén. Pero entró en ella para cumplir la voluntad de su padre».
A la vez manifestó, «hoy dos cosas muy importante tenemos que pensar; la primera es: ¿estamos dando la bienvenida a Jesús en nuestro corazón? o ¿estamos listos para entregar nuestra vida en las manos de Jesús en esta semana santa?»
Continuó, «hoy todos nosotros tenemos ramos de olivos y tenemos que guardarlos en nuestra casa, donde podremos verlos todos los días. Las ramas de olivo significan que Cristo es el rey de nuestra familia y el rey de nuestro corazón, Él es la respuesta de todas nuestras preguntas. Y Él va a dar el sentido a la vida. Por eso tenemos que dar un tiempo para quedarnos con él en nuestra vida cotidiana. Porque todo lo que tenemos vamos a perderlo con nuestra muerte. Por eso para tener la vida eterna tenemos que darle el primer lugar a Jesús.
La segunda cosa es que: tenemos que convertirnos como el burro en el evangelio de hoy. Aquí hay una cosa muy importante: el burro estaba llevando a Cristo a Jerusalén. Cuando Jesús estaba con él, el burro también recibió una bienvenida muy grande. Tenemos que convertirnos en burro. Esto significa que tenemos que llevar a Cristo con nosotros. Nosotros somos cristianos llamados para llevar a Cristo a los demás. Sin Cristo nuestra vida es un cero».
También Jesús tenía algunas razones para entrar en Jerusalén sobre un asno: En 1º lugar, El sabía que su tiempo ya había llegado. El tiempo para la glorificación del Hijo de Dios. Durante el tiempo de su misión pública El no permitió que se lo proclamara como el Hijo de Dios, porque su tiempo no había llegado. Pero ahora les permitió porque su tiempo ya había llegado.
En 2º lugar El quería proclamar que El era el Mesías: en el evangelio leímos muchas veces, que Jesús les dijo a los judíos que El era el Mesías. Pero ellos no lo aceptaron. Ahora El está entrando en Jerusalén, montado sobre un asno. Aquí Jesús esta anunciando que El es el Mesías.
En 3º lugar: Jesús quería proclamar que El era el rey de ellos. Porque El también era descendiente de David y su nacimiento fue como el de un rey. Aquí se estaban cumpliendo las palabras del profeta Zacarías: “el Mesías iba a venir a Jerusalén como un rey, en un asno.”
En 4º lugar: Jesús quería mostrar su popularidad a los fariseos. En su entrada de Jerusalén había mucha gente que le estaba saludando a El como el rey, significa que tenía muchos seguidores, si El podía organizarlos contra los fariseos, entonces ellos no podrían hacer nada en contra de Cristo. Pero Jesús no tuvo este objetivo sino que quizo dar la paz y el amor.
Por último Jesús quería fortalecer a sus discípulos para tomar su misión después de su resurrección.
