Tras un intenso mes de actividades, este domingo concluyeron las fiestas patronales en honor a Cristo Rey. La misa central estuvo presidida por el obispo auxiliar de la diócesis Enrique Martínez Ossola quien en su homilía volvió a criticar, duramente, la implementación de la educación sexual en las escuelas, «uno no decide lo que es, si nace varón es varón, si nace nena es nena. Hay situaciones especiales a tratar con respeto, pero eso es otra cosa».
La fiesta central se desarrolló, por la tarde, con la tradicional procesión con la imagen de Cristo Rey. La columna partió desde la parroquia y recorrió distintas calles de la ciudad de La Banda.
A lo largo del camino, la imagen sagrada bendijo a los bandeños que esperaban en sus veredas el paso de Cristo Rey. Fue un momento muy especial para toda la comunidad.
Ya en el templo, el Salvador fue recibido por una importante cantidad de fieles que lo aclamaron con gran alegría y gozo. Durante la Eucaristía, las pequeñas comunidades de Cristo Rey acercaron las coronas, las cuales representaron las dificultades que les toca atravesar como ser violencia, adicciones, falta de trabajo, entre otras.
Tras las lecturas biblícas el padre obispo, Martínez Ossola brindó su homilía. En la ocasión señaló, «estoy feliz de estar en la casa de un Rey muy especial. ¿Ustedes conocían un rey nacido en un establo o que se conducía en un burro?. Este Rey no tenía las características típicas porque decía que su reino no era de este mundo».
Seguidamente recordó, «el Papa Francisco nos habla que lo mundano va en contra de Dios, contra el espíritu que siempre crece, se justifica y contagia. Hoy quienes tienen el poder utiliza las fuentes laborales, información, educación como mecanismos de sometimiento e imposición y al que no le guste se queda afuera. Jesús no se nos impone, él no hace publicidad de sus obras y sin embargo trabaja en silencio».
«Su simple presencia nos anima a seguir y luchar pese a las adversidades que se nos presentan. Dios nos ha creado a su imagen y semejanza y hagan lo que hagan desde la llamada Ideología de Género uno no decide que es. Si nació varón es varón y si nació nena es nena; hay situaciones especiales para tratar con mucho respeto, pero eso es otra cosa», sostuvo con firmeza.
A la vez puntualizó, «la sociedad está muy permisiva, no podemos estar al servicio de doctrinas ni permitir que nos digan que la familia no existe. Mis padres jamás me mandaron a hacer cosas deshonrosas, pero si nos enseñaron desde chicos a cumplir nuestros deberes y obligaciones. Nadie puede decir que ama a Jesús por sobre todas las cosas, todos tenemos una responsabilidad ante su dolor y sufrimiento».
Finalmente el pastor de la iglesia santiagueña instó a los fieles a encomendar a la Virgen María, «el dolor, la miseria, la angustia y vamos a renovarnos para ser misioneros y servidores. Aprovechemos este tiempo para prepararnos para la llegada del Rey y tomemos su ejemplo como dice Francisco ‘María con su amor transformó un chiquero para animales en un hogar’. Pidamos que nos guíe para esperar a su hijo con amor y mayor compromiso”.