Este jueves, en horas de la madrugada, personal de la Comisaría 26 de Pozo Hondo, realizó un procedimiento en el marco de los controles viales permanentes para prevenir accidentes y garantizar la seguridad de los vecinos.
El operativo se inició tras recibir un llamado telefónico alertando sobre un masculino que realizaba maniobras peligrosas en moto.
El individuo fue interceptado en las calles Maximio Ruiz y 25 de Mayo mientras conducía una motocicleta Yamaha YBR 125, sin dominio colocado. Al ser identificado, se constató que aparentaba estar en estado de ebriedad.
Por este motivo, se solicitó la presencia de personal de la Dirección Gral de Seguridad Vial. El test de alcoholemia realizado arrojó un resultado de 1.253 gramos de alcohol en sangre.
Se verificó el estado del vehículo y del conductor en los sistemas correspondientes, confirmando que ambos estaban «sin novedad».
Por disposición del fiscal de turno, Dr. Rafael Zanni, el rodado fue retenido en calidad de secuestro preventivo en la base policial, mientras que el conductor quedó en libertad ambulatoria hasta recuperar la lucidez, momento en el que deberá presentar la documentación correspondiente del vehículo.