Esta mañana, falleció la actriz Elizabeth Taylor. Según anucnairon temprano Good Morning America y ABC News, la mujer de los ojos violeta falleció tras una larga hospitalización en el Centro Médico Cedars-Sinai Medical, de Los Angeles, los reportes indican que la causa de la muerte fue una falla en su corazón.
Padecía una insuficiencia cardíaca hacía mucho tiempo, pero antes sufrió otras enfermedades como un tumor en el cerebro, algunas neumonías, un tumor cerebral benigno, adicciones y varias operaciones de cadera que la obligaban a utilizar sillas de ruedas para ciertos desplazamientos. Una insuficiencia cardíaca sería la que, finalmente causó ayer el deceso.
La actriz estaba grave y pasó internada los últimos meses de su vida, su último cumpleaños lo pasó en cama y no pudo asistir a la última entrega de los Oscar. Fue considerada una de las mejores actrices de su generación, por clásicos del cine como Cleopatra y ¿Quién el teme a Virgina Woolf?
Su vida emocional fue muy intensa, se casó ocho veces, dos de ellas con Richard Burton pero ambas desembocaron en divorcio. La primera de las bodas se anunció en la prensa internacional como «El casamiento del siglo». Había conocido a Burton cuando rodaban Cleopatra y habían abandonado a sus respectivas parejas para estar juntos.
Fue la primera actriz en cobrar un millón de dólares por su trabajo y el American Film Institute la nombró como una de las mejores estrellas femeninas de todos los tiempos.
Primeros años
Su nombre completo es Elizabeth Rosemond Taylor, hija de emigrantes estadounidenses en el Reino Unido, con los que regresó a EE. UU. antes de la Segunda Guerra Mundial. Empezó a actuar cuando era muy joven y su popularidad comenzó apenas a las 12 años. Con el tiempo, se convirtió junto a Marilyn Monroe en una de las más grandes actrices del momento.
Entre su profusa carrera se destacan: Mujercitas (1949), El padre de la novia (1950), Ivanhoe (1952), Gigante (1956), Un gato sobre el tejado de cinc (1958), Almas en conflicto (1965), Reflections in a golden eye (1967), entre otras, con algunos paréntesis y una reaparición en 1994 con un rol homenaje en Los Picapiedras.
Uno de sus últimos aportes en la industria del cine y la TV fue en un capítulo de Los Simsons, el único en el que el pesonaje de Maggie habla, y la voz de la niña fue la de Liz Taylor. Su última aparición fue en el telefilme Esas chicas fabulosas, junto a Shirley MacLaine, Debbie Reynolds y Joan Collins.
A partir de su alejamiento del cine, se acercó al trabajo social, apoyando e impulsando campañas de lucha contra el Sida. Fue una de las pocas incondicionales amigas de Michael Jackson, con quien compartía el centro de las miradas de la prensa internacional, y siempre estaba invitada a las galas de un Hollywood, que en los últimos años no se cansó de rendirle tributo.
En Twitter. La actriz tenía una cuenta en la red social. Sus últimos tuits difundían una entrevista con Kim Kardashian y una de sus últimas frases escritas allí, en julio, fue: «Sos lo que sos. Todo lo que podés hacer en este mundo es ayudar a los otros a ser ellos mismos y ser mejores, con todos los que los rodean.
Fuente: La Voz del Interior